Quién es Sam Bankman-Fried, el rey de las criptomonedas condenado a 25 años de cárcel

Dos años después de lanzar un fondo de cobertura, Alameda Research, Bankman-Fried fundó FTX en 2019, una plataforma que permitía a los usuarios comprar y vender activos digitales como bitcoin. Las valoraciones de las criptodivisas subieron, hasta elevar el patrimonio neto de este físico a 26.000 millones de dólares en octubre de 2021, según la revista Forbes. Antes de cumplir 30 años, se convirtió en la vigesimoquinta persona más rica de Estados Unidos.

Bankman-Fried transformó esa riqueza en influencia política y se convirtió en uno de los mayores donantes de los candidatos y causas demócratas antes de las elecciones de mitad de periodo de 2022 en Estados Unidos. No obstante, también donó a los republicanos a través de hombres de paja para enmascarar su participación, ha establecido este jueves el juez de distrito Lewis Kaplan en su audiencia de sentencia.

Afincado en un caro complejo turístico de las Bahamas, Bankman-Fried se hizo famoso por su despeinada melena rizada y por llevar pantalones cortos, incluso cuando recibía a dignatarios como Bill Clinton. En un sector de las criptomonedas plagado de hackeos y blanqueo de dinero, contrató a famosos, como el 'quarterback' de la NFL Tom Brady y el cómico Larry David, para que aparecieran en anuncios que presentaban a FTX como una empresa segura. Además, apoyó públicamente los esfuerzos para regular las criptomonedas.

Sin embargo, los fiscales dicen que su conducta relajada y el cultivo de una imagen responsable ocultaron su malversación de fondos de clientes durante años. Sostienen que el robo llegó a su punto álgido en 2022, cuando los precios de las criptomonedas se desplomaron y utilizó fondos de FTX para cubrir pérdidas en Alameda.

Un jurado lo declaró culpable de siete cargos de fraude y conspiración el 2 de noviembre, tras un juicio que duró un mes en un tribunal federal de Manhattan. Tres antiguos miembros de su círculo íntimo, que reconocieron su papel y aceptaron cooperar con la Fiscalía, testificaron en su contra y trazaron un retrato poco halagüeño de su carácter, al detallar casos en los que se enfadaba con sus colegas y sugerir que su estrafalaria personalidad era sobre todo una actuación.

«El objetivo era el poder y la influencia (...) Lo hizo porque quería ser una persona enormemente, enormemente influyente en la política del país», ha señalado el juez de distrito Lewis Kaplan antes de sentenciar a Bankman-Fried. El fundador de FTX se declaró inocente y ha prometido recurrir su condena y la sentencia. Al declarar en su propia defensa en el juicio, el licenciado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts reconoció una gestión inadecuada de los riesgos, pero negó haber robado fondos.