El Sabadell queda a expensas del Gobierno frente a BBVA tras el no de Unicaja y Abanca a una fusión

«Abanca desea insistir que no tiene interés en esta operación». La entidad gallega fue contundente este 12 de mayo en su rechazo, después de que 'Expansión' publicara que estaban en conversaciones con los catalanes. La voluntad del grupo controlado por Juan Carlos Escotet no es ser absorbido por una entidad mayor y diluir su participación. En todo caso, se colocan como banco comprador, según se desprende de sus palabras: «Queremos enfatizar que solo participaremos en operaciones que garantizan la preservación de nuestro modelo de gobernanza y nuestro modelo de negocio, pilares fundamentales de nuestro éxito». Es decir, operaciones tras las que Abanca tenga todo el control.

Noticia Relacionada

El intento de frenar la opa de BBVA por parte del Gobierno afronta fuertes dudas legales

Daniel Caballero

Unicaja defiende, por su parte, un proyecto en solitario. Fuentes del banco andaluz apuntan a que están «centrados en trabajar para seguir creando valor a largo plazo para clientes y accionistas sobre la base de un proyecto independiente y la idea de que estamos ejecutando nuestro plan estratégico para los próximos años».

El no de ambas entidades a colocarse como 'caballero blanco' es firme y provoca que solo el Ejecutivo pueda echar por tierra la opa ya que, según fuentes financieras, otras alternativas como Bankinter, Ibercaja o un banco extranjero serían casi imposibles en este momento.

El Gobierno mantiene su postura de rechazo contra la opa de BBVA tanto por las formas como por el fondo, algo en lo que están enrocados desde el inicio. Pero la importancia de su pronunciamiento ahora es vital para el devenir de la operación ya que en estos momentos tiene la posibilidad -aunque existen dudas legales- de intervenir en la opa para endurecer tanto las condiciones previamente fijadas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) que haga desistir a los vascos.

Aunque el Sabadell ahora muestra un tono más cauto, lo cierto es que hace mes y medio apelaron al Ejecutivo para que torpedeara la opa. Fuentes financieras apuntan al riesgo de lugar su futuro al Gobierno, que ha demostrado un hambre de intervención en el Ibex 35 pocas veces visto.

De cara a su decisión, el Ministerio de Economía ha abierto hasta el 16 de mayo una consulta pública para que cualquiera le dé su opinión sobre la operación; buscar razones que justifiquen una intervención dura. Este movimiento ha generado preocupación en el sector financiero y también entre los expertos ya que sienta un precedente muy peligroso.

BBVA, por su parte, se muestra cauto y busca mantener un perfil bajo a la espera de que se resuelva la situación. Fuentes financieras señalan que en el banco vasco también ha caído con preocupación la consulta pública del Gobierno, y que ahora la incertidumbre sobre la operación ha escalado todavía más si cabe. Ya no son solo los plazos lo que genera esa incertidumbre, sino también si la opa sobrevivirá pasado el mes de junio con la decisión de La Moncloa.

Así las cosas, la consulta pública estará abierta hasta el 16 de mayo, pero el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, tendrá hasta el 27 de mayo para decidir si eleva el caso al Consejo de Ministros para intervenir en la opa. Si eso se produce, algo que se da por descontado, el Consejo de Ministros tendrá un mes para tomar una decisión y comunicarla a las partes y al mercado.

El sentido de esa decisión es una completa incertidumbre. Algunas fuentes apuntan a que el Ejecutivo podría no ser tan duro como se espera con la opa pero sí anunciar ya en este momento que vetaría una posterior fusión de las dos entidades si BBVA triunfa con la operación, de tal manera que los accionistas del Sabadell pudieran decidir si acudir o no a la opa teniendo también esa información. Otras fuentes, en cambio, piensan que el Gobierno sí podría hacer tambalearse la opa con su intervención. En lo que coinciden, eso sí, es que la consulta pública no podrá utilizarse como base legal para emitir su veredicto.