Moncloa recibió hace una semana al checo Kretensky para su posible entrada en Prisa

En este contexto, según ha podido saber ABC, uno de los multimillonarios con los que iniciaron conversaciones, el magnate checo Daniel Kretinsky, propietario del grupo de supermercados galo Casino y dueño del 50% de Caprabo en España, se reunió ya la semana pasada con el equipo de presidencia de La Moncloa, liderado por Manuel de la Rocha.

Las fuentes explican que Kretinsky –que según Forbes, tiene una fortuna estimada de alrededor de 9.500 millones de dólares–, mostró interés por el total del grupo de medios español como antaño lo hiciera con el diario progresista francés Le Monde, del que llegó a comprar, en 2018, el 49% de la participación de la empresa matriz que tenía Matthieu Pigasse, el director ejecutivo de Lazard France. Ese acuerdo convirtió a Kretinsky en el dueño de poco más del 13% del periódico y de sus publicaciones hermanas.

Entonces, los empleados del periódico galo mostraron su total desacuerdo, aduciendo que no les convencía la trayectoria empresarial del magnate en torno a actividades fósiles altamente contaminantes, y también por la sospecha de que querría usar Le Monde para ganar influencia de cara a otros negocios.

Además, algunas fuentes financieras lo relacionaron entonces, y lo relacionan aún, con algunos negocios con el Gobierno ruso de Putin, lo que definitivamente empujó al Ejecutivo francés a presionar para que el multimillonario checo salidera del accionariado de Le Monde. No en vano, gran parte de su fortuna la ha amasado a través de Energeticky Prumyslovy (EP) –el grupo energético más grande de transporte de gas ruso a Europa Central–, con el que emplea a más de 25.000 personas.

Precisamente esta vinculación de negocios energéticos con Rusia es lo más llamativo para la mayoría de las fuentes financieras consultadas, que recuerdan que el Gobierno español hizo lo imposible para despejar la oferta que hicieran los húngaros de Magyar Vagon por Talgo, por los rumores que relacionaban a su alta directiva también con el presidente ruso, Vladimir Putin.

Mientras tanto, crece la expectación de cara a la junta de accionistas del grupo Prisa, adelantada al próximo 14 de mayo por el presidente, en la que todo el mundo espera que los accionistas españoles presenten una oferta de compra a través de un inversor internacional, que pudiera ser, tras la reunión con Moncloa, el propio Kretinsky.

Sin embargo, fuentes del entorno del presidente del grupo de medios español explican a este periódico que Oughourlian, propietario de cerca del 30% del capital del grupo, mantiene su confianza en salir airoso de la reunión con sus accionistas y mantiene su posición de no vender ni su paquete de acciones a título personal ni la empresa por partes, y sigue deslizando que aquel que esté interesado en Prisa tendrá que lanzar una opa sobre el 100% del capital a un precio, como mínimo, de 0,67 euros por acción, tal y como avanzó ABC.

En el momento actual, Prisa tiene un valor en Bolsa de unos 524 millones de euros y si se lanzara una opa al precio que quiere Oughourlian la valoración sobrepasaría los 800 millones estimados a priori por el presidente.