ajuste de cuentas
Vivienda: la campaña no pasa por aquí
En este sector se hizo realidad lo que decía Burke: «Para que el mal triunfe basta que los buenos no hagan nada»
El aprendiz de brujo (26/07/2024)
Dedos gordos (22/05/2024)
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónLa cuestión de la vivienda es un asunto preocupante, pero la campaña electoral de las europeas no pasa por ahí. El Partido Popular propuso hace unos días una rebaja de impuestos a los jóvenes de hasta 35 años que afectaría los primeros 30. ... 000 euros de su renta. La rebaja está condicionada a que el ahorro fiscal se utilice en la compra de vivienda, crear una empresa, formarse o tener hijos. La propuesta, sin embargo, apenas ha despertado el interés de los medios o de las redes sociales.
Hay una actitud de brazos caídos en este asunto que recuerda la frase de Burke de que «para que el mal triunfe sólo se necesita que los hombres buenos no hagan nada». Quizá lo más grave es la manera en que se han generalizado malas políticas desde que gobierna la coalición que encabeza Pedro Sánchez. Todo aquello que desde hace décadas se sabía que no funcionaba en el mercado inmobiliario –controles de precios, desequilibrio jurídico en favor de los inquilinos y en desmedro de los propietarios, medidas de apoyo a la demanda sin contrapartidas en la oferta, rigidez en la oferta de suelo– se ha repetido corregido y aumentado. El resultado está a la vista: los precios han subido como cohetes. La oferta de alquiler permanente ha caído un 15% en el primer trimestre de este año, mientras el de temporada ha crecido un 56%, según los datos del portal idealista.com.
Palma prohibirá los nuevos alquileres vacacionales
Mayte AmorósEl Ayuntamiento de la capital balear plantea cobrar dos tasas a los cruceristas para visitar la ciudad y otras medidas contra la masificación tras la manifestación multitudinaria del sábado
El mercado inmobiliario es de gran complejidad. Las opciones más eficientes para actuar sobre el mismo implican cambios regulatorios en la financiación de la vivienda, la creación de suelo urbano y las garantías sobre los derechos de propiedad. Sobre eso se pueden aplicar subsidios o no. Los economistas son enemigos de las ayudas que se dieron a la adquisición de vivienda en España hasta la crisis financiera de 2008 porque insisten en que se las terminaba llevando el promotor a través del precio. Sin embargo, hay un ángulo nada despreciable en aquellas ayudas: su dimensión como 'nudge' (empujoncito) que operó durante años como un estímulo para la oferta.
La discusión sobre lo que debemos hacer en las actuales circunstancias requiere un debate nacional amplio y dinámico. También se necesita voluntad política para desatar las fuerzas del mercado. Las preferencias de las nuevas generaciones de españoles han cambiado y hay que abordar en serio el asunto del alquiler social. Es preciso introducir nuevos actores en el sistema, como los fondos sin lucro que operan en Austria para que una solución social no tarde 50 años. Hay que evaluar el edificio jurídico hipotecario que resultó deformado por la introducción de elementos como la dación en pago que trajo la crisis financiera. Hay que desregular la gestión del suelo para expulsar a los oportunistas que chantajean a los promotores. Todo eso hay que hacerlo favoreciendo un mercado libre donde todos los proyectos de vida puedan encontrar acomodo en vez de que la actual fragmentación política le arregle la existencia a unos pocos.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete