Cinco claves sobre las hipotecas para millennials

1. Movilidad. Internet es el gran aliado de esta generación. La visita a la sucursal exige emplear un tiempo que se puede emplear en hacer cosas más importantes. Los millennials prefieren conocer y comparar la oferta de hipotecas existentes a través de su smartphone o tablet. Consideran que toda la información que pueda darles el comercial de un banco en persona, puede dársela la propia entidad a través de su web oficial, siempre y cuando esté explicada en términos claros y sin letra pequeña.

2. Online. Otro de los aspectos que valora este comprador es que, una vez se haya escogido la hipoteca ideal, se tenga la posibilidad de realizar todos los trámites de forma telemática. Toda la información personal, laboral o fiscal necesaria para realizar el scoring se hace por medio de un formulario que admite documentos adjuntos. El último paso del proceso todavía se realiza ante notario, pero todo apunta que queda muy poco para que la firma digital de las escrituras se ponga en marcha.

3. Inmediatez. Tal y como hemos apuntado, el comprador millenial valora enormemente su tiempo, por lo que la celeridad en la respuesta por parte del banco resulta esencial. Una vez recibida toda la documentación, el potencial cliente espera que su solicitud se resuelva rápidamente. La mayoría de los bancos online suele ser bastante ágil en su decisión gracias a la automatización de procesos, por lo que la incertidumbre del solicitante apenas se dilata más allá de una semana.

4. Vinculaciones. Los millennials se definen por su gusto por la independencia, así que huyen de las hipotecas que reclaman demasiadas vinculaciones. La principal atadura que rechazan es el aval, ya que no quieren depender de nadie. Tampoco ven con buenos ojos comisiones como la de apertura y estudio, o productos como los seguros de vida o el plan de pensiones. Las hipotecas 100% online son las favoritas de este colectivo, ya que muchas de ellas están exentas de comisiones y vinculaciones.

5. Interés. Los compradores más jóvenes son conscientes de los estragos que causó el Euríbor cuando se colocó en máximos. Los miembros de la generación Y que calculan la cuota hipotecaria que deberán pagan cada mes por su casa, no solo tienen en cuenta la tasa actual de este índice de referencia, en los niveles más bajos de su historia, sino que se plantean un eventual escenario de subida para ver si serán capaces de afrontarlo. Es por ello que muchos de ellos se decantan por la hipoteca fija.