La inflación se modera en julio y marca un 2,8% por el impacto del IVA del 0% al aceite de oliva sobre el precio de los alimentos

En concreto, el IPC de los alimentos baja 1,1 puntos y se sitúa en el 3,1%. Se trata de la cifra más baja en casi tres años, desde octubre de 2021. Esta caída se debe principalmente al abaratamiento del aceite de oliva y de la fruta.

Además del impacto de la rebaja fiscal sobre los alimentos básicos, también influye la reducción del IVA a la luz al 10%, que baja el precio de la electricidad -una reducción automática que se activa cuando el coste supera los 45€/MWh-. En julio, los precios de la vivienda subieron un 3,2%, 1,9 puntos menos que en el mes de junio.

El encarecimiento del ocio también fue menor en comparación con el año pasado. Su tasa anual descendió 1,4 puntos, hasta el 1,6% por una menor subida de precio en los paquetes turísticos.

La inflación subyacente -que excluye el precio de los alimentos frescos y la energía- también cae y marca un 2,8%. Su menor tasa desde 2022.

Tal y como muestran los datos publicados por Estadística, el precio del aceite presenta una tasa negativa y cae un 5,5% en comparación con el mes pasado. Sin embargo, si se compara con lo que costaba hace un año sigue siendo un 38% más caro, y el aumento acumulado desde enero se sitúa en un 3,7%.

El pasado 25 de junio el Gobierno prorrogó la reducción del IVA al 0% a los alimentos básicos. La novedad fue la inclusión del aceite de oliva en la lista de productos afectados por la rebaja, por ser uno de los alimentos que más se ha encarecido en el último año.

Desde el 1 de julio y hasta el 30 de septiembre el pan, los huevos, la verdura la fruta y aceite de oliva no estarán gravados por el Impuesto de Valor Añadido. A partir del 1 de octubre, y siguiendo las recomendaciones de Bruselas, el IVA de estos productos pasará a ser del 2% hasta el 31 de diciembre.

La electricidad también presenta una tasa negativa este mes y cae un 6% en comparación con junio. No obstante, sigue costando un 7,4% más que hace un año y, desde enero, se ha encarecido un 10,7%.

Como es habitual, tras la publicación del dato, el Gobierno ha celebrado la moderación del IPC y ha declarado que «durante el mes de julio ha seguido constatándose la progresiva bajada de la inflación de los alimentos, que, gracias a las medidas de apoyo adoptadas, está permitiendo reducir su diferencial con la general». El Ministerio de Economía también ha trasladado que «estos factores, junto con la evolución de la economía, permiten mejorar la capacidad de compra y la renta real de los hogares»-