IA abierta, la variable democratizadora de la eclosión de los algoritmos

Óscar Corcho, catedrático de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, y miembro del Departamento de Inteligencia Artificial de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), señala cómo «la discusión sobre IA abierta frente a una IA cerrada (caracterizada, por ejemplo, por grandes modelos de lenguaje creados por grandes compañías como Google u OpenAI) es muy similar a la discusión que ha existido durante varias décadas sobre el código abierto y el código cerrado en el 'software'. Ambos tienen sus ventajas e inconvenientes, y entendemos que esta discusión permanecerá durante varios años». Por ello, en el Máster en IA de la UPM se hace hincapié en la creación y uso de especificaciones que sean abiertas, para que pueda haber comunidades que contribuyan y hagan uso de las mismas.

Corcho destaca «las especificaciones del consorcio de la World Wide Web hasta modelos de lenguaje propietarios» en esta apertura de código, y añade que la mayor parte de los desarrollos básicos (algoritmos, modelos, procesos) que se hacían en IA eran de carácter abierto: «Y ha dado lugar a comunidades activas de desarrolladores y a la existencia de multitud de librerías (por ejemplo, para el lenguaje de programación Python). Ciertamente, con la generación de algunos de los recientes grandes modelos de lenguaje, la atención se ha puesto en usar algunos de estos modelos propietarios, pero esta tendencia probablemente cambiará en los próximos meses o años, con la irrupción de alternativas más económicas y que aún así consiguen buenos rendimientos para un gran número de tareas».

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Plataformas como PyTorch o TensorFlow conviven en el ecosistema con OpenAI. Apertura en línea con la actividad del Software Libre y del Código Abierto. Por ello, Miguel Ángel Fort, director general de ISDI Coders y creador del podcast 'Al Borde del Burnout' (divulgativa apelación a tomarse la tecnología sin agobios), señala cómo «Nocode es el movimiento que surge ante la necesidad de profesionales no técnicos para desarrollar producto digital o mejorar la operativa interna a través de herramientas digitales sin saber programación».

Fort, que participará en el evento organizado por IEBS Digital School 'The Next About Digital Leaders' (Barcelona, 19 de octubre) con 'El movimiento NoCode y la IA para aumentar la productividad de los equipos', destaca la importancia de que la IA nos sea cada vez más natural… y así debe serlo en las pymes («será una clave de supervivencia»), y recuerda que «no hay que temer tanto a que la inteligencia artificial te quite el puesto de trabajo, sino que alguien que sepa manejarla te lo quite a ti». Cómo dirigirse a la herramienta, el 'prompting', ya tiene demanda en las empresas de este tipo de perfiles, en tiempos, apunta el especialista, «en los que la IA podrá, en menos de tres años, desarrollar, por ejemplo, el prototipo de una aplicación en cinco minutos, algo que supone mucho dinero y personal en la actualidad».

En este contexto, Ricardo J. Palomo, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales y catedrático de Economía Financiera de la Universidad San Pablo CEU, incide en la importancia de que «el código fuente, su funcionamiento o 'mecanismo' interno, está abierto a cualquier usuario: es público y puede ser utilizado, modificado y distribuido por cualquier persona sin restricciones. Gracias a la IA abierta, empresas, universidades e instituciones pueden compartir y colaborar en el desarrollo de esta tecnología».

Palomo, también delegado de la Rectora para Transformación Digital y director del Metaverse I+D Community Lab de la institución académica, señala algunas aplicaciones concretas para las empresas «como el desarrollo de 'chatbots' y asistentes virtuales para atención al cliente, el análisis de datos y predicción de patrones en el mercado, la optimización de procesos de producción y logística, la personalización de experiencias de usuario en aplicaciones y sitios web o, por ejemplo, la detección y prevención de fraudes en transacciones financieras». Y añade: «El intercambio de conocimientos y técnicas entre diferentes sistemas puede conducir a mejoras en la generación de respuestas, capacidades de comprensión y en general, en la calidad de las interacciones del 'chatbot', así como otras posibilidades».

Los especialistas coinciden en la relevancia de un desarrollo ordenado y responsable, de códigos éticos y buenas prácticas. Así lo subraya Manuel Ruiz, gerente de Big Data e IA de ProFuturo, programa de educación digital de Fundación Telefónica y la Fundación la Caixa: «Si buscamos democratizar la IA, hay que dar acceso al código fuente y facilitar la investigación y el desarrollo conjunto, sólo esto permitirá acelerar la innovación y la adopción de la IA en diversos ámbitos». ProFuturo está poniendo en marcha su nueva plataforma con Moodle y otros productos 'open source' para mejorar y adaptar el sistema según las necesidades de los usuarios.

«Ya existe un ecosistema (añade Ruiz) donde el código fuente, disponible de forma pública, puede ser utilizado, modificado y distribuido libremente por cualquier persona, algo clave para la sostenibilidad de esta tecnología y su aprovechamiento en organizaciones del tercer sector. Y aunque existen diferentes iniciativas de chats basados en IA de código abierto, los más conocidos no tienen una visión de acceso masivo. Es el gran reto/problema de los 'modelos propietarios' de Google, Open AI, Amazon, Microsoft, etc. Solo Meta lo ha puesto en 'open source' de momento». Y añade la importancia de la inclusión de «datos abiertos del Banco Mundial, Unesco o incluso de las propias redes de comunicación».

Esta apuesta por una IA más social se demuestra con la iniciativa de ProFuturo, en colaboración con la Universidad Pontificia de Salamanca y Cátedras Telefónica, para organizar, desde hace cuatro años, #hack4edu, orientado a resolver los problemas que plantea la educación digital en zonas vulnerables, esta vez con la IA como elemento indispensable: «En el entorno educativo, si deseamos utilizar la IA, tenemos dos opciones: realizar una inversión importante en nuevas licencias o lanzar eventos como este, donde la IA colectiva y equipos multidisciplinares desarrollen herramientas de código abierto en IA».