Hacienda retrasa el debate sobre la reforma de la financiación autonómica a después de su reunión con la Generalitat

Había una cierta expectativa al respecto después de que Hacienda convocara el pasado día 12 una reunión técnica con representantes de todos los gobiernos autonómicos de régimen común para tratar el documento base sobre población ajustada que debe servir de sostén para el nuevo modelo. El Ministerio presentó entonces un pequeño documento de trece páginas que volcaba -con algunos errores, según las fuentes consultadas- las posiciones de las comunidades autónomas sobre su propuesta inicial y que eliminaba el criterio de dispersión de la población, lo que provocó las protestas de algunas autonomías.

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En los últimos días, la Secretaría General de Financiación Autonómica y Local se ha dirigido a los gobiernos autonómicos, según confirman varias fuentes de estos, para invitarles a que realicen nuevas aportaciones al documento a lo largo del próximo mes, lo que retrasará hasta mediados de marzo la existencia de un nuevo documento de base para la financiación autonómica. El mensaje ha sido interpretado por los ejecutivos autonómicos como un indicio inequívoco sobre las intenciones del Gobierno de silenciar cualquier debate sobre la financiación autonómica.

Fuente de Hacienda confirman que se el mensaje que se les ha transmitido a las comunidades autónomas es que hagan las aportaciones que consideran precisas al documento planteado por Hacienda, que no se presentó tanto como propuesta sino como un resumen de los criterios que disfrutaban de un respaldo mayoritario de las autonomías.

La maniobra complica cualquier opción de debate sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, ya que ni siquiera se dispone de una base común sobre la que construir el modelo. Se da la circunstancia de que los comunicados remitidos por los gobiernos autonómicos del PP tras la reunión técnica de la semana pasada instaban al Gobierno a presentar una propuesta de reforma de la financiación autonómica y a aclarar si esta es compatible con el modelo de financiación singular pactado con Cataluña.

También le evita al Gobierno entrar en la cuestión justo 48 horas antes de que los representantes del Gobierno Central y de la Generalitat de Cataluña se reúnan en la comisión bilateral sobre asuntos fiscales, con los avances para la financiación singular de Cataluña encima de la mesa.

El foco queda ahora fijado en la quita de deuda, que tanto la Generalitat como los partidos nacionalistas exigen para asfaltar la salida de Cataluña a los mercados de deuda y que Hacienda ha visto desde el minuto uno como el primer paso para satisfacer las ambiciones financieras y fiscales del nacionalismo. En el aire también la posibilidad de que Hacienda plantee unos objetivos de déficit, en el caso de que consiga un acuerdo político que abra la puertas al proyecto de Presupuestos del Estado de 2025.

«¿Crees que Montero va a hacer algo para mejorar la financiación de las comunidades gobernadas por el PP? No me lo creo». La frase, pronunciada por un barón autonómico del PP muestra el escepticismo que reina dentro de las autonomías a una semana de la celebración del Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).

Un cónclave que fuentes del PP cercanas a uno de estos gobiernos autonómicos creen que solo servirá para abordar el asunto de la condonación de la deuda «para contentar a sus socios, los que mantienen en el poder a Pedro Sánchez».

Por su parte, Jorge Azcón, presidente de Aragón, avisaba ayer a Sánchez durante un desayuno informativo organizado por Nueva Economía que «el Gobierno debe escuchar los problemas de todas las autonomías y no sólo de aquellas cuyos votos necesita para seguir en La Moncloa» y avisó del peligro de aprobar una condonación de deuda sin abordar el sistema de reforma del modelo de financiación.