El Gobierno presiona a Santa Bárbara para pactar una operación con Indra

Así, según ha podido saber este periódico, desde el Ministerio de Defensa, con el mandato de La Moncloa, se está presionando a la antaño compañía de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), Santa Bárbara Sistemas, para que se siente a negociar con Indra, sea para venderle una participación, sea para ampliar la participación que ya tiene en Tess Defence, sociedad que gestiona el programa VCR 8x8. Recordar que España vendió Santa Bárbara a General Dynamics en 2001, por la crítica situación económica que pasaba la compañía de defensa española.

Las mismas fuentes aseguran que hace ahora una semana, representantes de la empresa que preside Marc Murtra, y directivos de alto nivel de la estadounidense General Dynamics (GD), matriz de Santa Bárbara Sistemas –que es líder del mercado en la industria aeroespacial y de defensa–, mantuvieron conversaciones para abordar una posible operación de compra por parte de Indra, a instancias del Ministerio de Defensa liderado por la ministra Margarita Robles.

Este periódico ya adelantó además que el objetivo de La Moncloa es seguir engordando el area de Defensa de Indra, y a las conversaciones para buscar la manera de que la semipública se «alíe» con Santa Bárbara Sistemas, se une sus intenciones de que siga ampliando su participación en ITP Aero, donde Indra ya tiene un 9,5%. Mientras tanto, el Ejecutivo con la compañía liderada por Murtra estudian la forma de adquirir Hispasat. La estrategia pasa por vender la parte tecnológica de Indra, Minsait, con la que quiere hacer caja, por valor de 1.500 millones de euros.

Ahora bien, las fuentes advierten de que el caso de Santa Bárbara es peculiar. Tras haber sido privatizada en abril de 2000, y después vendida a General Dynamics, hoy ya tiene relación de negocio con Indra. Convive con ella, junto a Escribano y Sapa –también accionistas de Indra–, en Tess Defence, la 'joint venture' de las tres compañías a la que se encargó la fabricación del vehículo de combate 8x8.

En Tess Defence, creada hace cuatro años, Santa Bárbara Sistemas es su principal accionista, con un 26%; seguida por Indra, con un 25% –y con la aspiración de subir al menos al 51%–; después SAPA, que controla el 24,67%; y Escribano, con un 24,33%. El cambio en la estructura accionarial, en cualquier caso, deberá ser consensuada entre todos los accionistas, por lo que, según las fuentes, subir la participación de Indra la sociedad pasaría por hacerlo a costa de la posición de Santa Bárbara.

Expertos consultados por ABC no se explican la relación entre los negocios que el Ejecutivo advierte que tienen una empresa como Indra con otra como Santa Bárbara Sistemas, que se dedica a la fabricación e integración de vehículos blindados. Además, su actividad engloba la fabricación y montaje de armas y piezas para armas ligeras, de calibre medio y lanzador. Mientras, Indra es en la actualidad un proveedor mundial de soluciones propias en los mercados de Transporte, Tráfico Aéreo y Defensa. Tanto como no ven relación con ITP Aero, dedicada al diseño, desarrollo, fabricación y mantenimiento de sistemas de propulsión aeronáuticos y componentes para la aviación comercial y de defensa.

Para el Gobierno, tanto el aumento de participación en ITP Aero como la entrada con una posición significativa en Santa Bárbara, como será la posterior integración de Hispasat, tiene todo el sentido de negocio, y forma parte de todos los potenciales movimientos encuadrados en el plan estratégico que anticipó el propio presidente de Indra –hoy ejecutivo, entonces no–, tras la junta general de accionistas del 30 de junio del año pasado: «Indra tiene la vocación y la decisión de ser el gran operador tecnológico en el ámbito de la defensa, de ser la gran empresa de defensa española y, por tanto, sí de ser el campeón nacional».