El Gobierno británico da marcha atrás en una de las medidas más polémicas de su plan fiscal
Liz Truss descarta la rebaja prometida en el tramo más alto del IRPF tras el desplome de la libra y la crisis de confianza desatada en su Ejecutivo
Era visto. Después de que los mercados reaccionaran mal al anuncio del plan de reducción de impuestos de la primera ministra británica, Liz Truss, y que la libra se desplomara ante el dólar a niveles históricos, la presión se volvió sofocante tanto ... dentro como fuera de las filas conservadoras.
Así, a primera hora de la mañana de este lunes, el gobierno anunció en un comunicado que da marcha atrás en una de las medidas más polémicas del plan: la reducción de la tasa más alta del impuesto sobre la renta, que pretendía reducir del 45% al 40%. «Está claro que la abolición de la tasa impositiva del 45% se ha convertido en una distracción de nuestra misión primordial de abordar los desafíos que enfrenta nuestro país», reza el texto, firmado por el ministro de Finanzas, Kwasi Kwarteng, que añadió que por este motivo «anuncio que no procederemos a la abolición de la tasa impositiva del 45%».
El anuncio del paquete fiscal, que se financiaría con préstamos del gobierno, creo una situación de caos que incluso requirió la intervención del Banco de Inglaterra para calmar a los mercados.
La noticia de que ahora darán marcha atrás en esta medida, llega solo un día después de que la primera ministra defendiera en sendas entrevistas en la BBC y en el diario 'The Telegraph' que están haciendo «lo correcto» aunque sí concedió que quizá el manejo del anuncio no fue el mejor.
También este domingo 'The Sunday Times' reveló que el ministro acudió a una fiesta el mismo día del anuncio con financieros que podrían beneficiarse con las medidas, algo a lo que hizo referencia la mañana de este lunes en el programa Today de la cadena LBC al reconocer que asistir a este evento fue un error, pero matizó que fue organizado por el Partido Conservador y que sólo estuvo allí durante un cuarto de hora.
Por otro lado, Rachel Reeves, responsable de Finanzas en el partido Laborista, aseveró en un comunicado que el cambio de sentido en la política del ejecutivo, que no ha cumplido ni un mes en el poder, ha llegado demasiado tarde, porque el llamado «mini-budget» o mini-presupuesto ya está provocando problemas a las familias, como «hipotecas más altas» y «precios más elevados».
«Los Tories han destruido su credibilidad económica y dañado la confianza en la economía británica», afirmó.
El mercado ha aplaudido la rectificación del Gobierno de Truss, y la libra ha subido con fuerza tras el anuncio. A media sesión, la libra esterlina remontaba y ya se intercambiaba por 1,12 dólares.
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