antes del 30 de junio
La Generalitat aprieta a Hacienda para definir una lista de singularidades catalanas que le den derecho a más financiación
La consejera de Economía y Finanzas, Alicia Romero, considera «evidentes» las ventajas de Madrid por el efecto capitalidad: «Nosotros no buscamos privilegios, sino reglas del juego justas»
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A un mes escaso de que venza el plazo acordado por el Gobierno con PSC y ERC en el marco del acuerdo para la investidura de Salvador Illa para sentar las bases de un nuevo modelo de financiación autonómica, la Generalitat ha dado un ... paso al frente y ha exigido que antes de esa fecha se defina de manera clara un listado de las singularidades que se le reconocen a Cataluña como paso previo para garantizar su financiación en el futuro modelo de financiación.
En una conferencia pronunciada en Madrid, en la sede del Consejo General de Economistas, la consejera de Economía y Finanzas de la Generalitat, Alicia Romero, que está llevando esta negociación, ha dejado claro que «el esquema del nuevo modelo tiene que estar el próximo 30 de junio y debe explicitar las singularidades de cada comunidad autónoma, que nosotros tenemos de manera clara porque ejercemos más competencias que otras autonomías".
La consejera se ha resistido a aclarar si la propuesta que defenderá la Generalitat de Cataluña significaría su permanencia en el régimen común, en el que están encuadradas todas las comunidades autónomas de España salvo las haciendas forales de Navarra y País Vasco, y se ha limitado a subrayar lo que se ha convertido desde hace meses en el relato del gobierno catalán de Salvador Illa sobre el particular: el modelo debe reconocer las singularidades de Cataluña y financiarlas, dentro de un esquema que pueda extenderse a otras comunidades autónomas.
También ha negado otra vez que el modelo que proponen sea un concierto catalán aunque ha reiterado que su idea es que Cataluña recaude todos los impuestos que se generan en el territorio, pagar una aportación al Estado por las competencias que ejerce en Cataluña, exactamente igual que sucede con el cupo, y eso sí realizar una aportación a la solidaridad, un esquema que se parece más a los conciertos vasco y navarro que a la financiación de las comunidades autónomas de régimen común.
El argumento de la Generalitat es que este modelo puede extenderse al resto de comunidades autónomas en función de sus singularidades, que en el caso de Cataluña ha asociado a las mayores competencias normativas que ejerce y que están en vías de ampliarse en los próximos meses por la ristra de acuerdos alcanzados por el Gobierno para ensanchar su perímetro competencial, como la gestión de Rodalíes. "Nuestro modelo no busca privilegios, sino unas reglas del juego justas", ha dicho Alicia Romero.
Romero también ha hablado de otras singularidades, en concreto las de la Comunidad de Madrid. En una conferencia pronunciada en la capital ha considerado "evidente" que Madrid tiene una serie de ventajas por la concentración en su territorio de los centros de decisión política y del poder financiero y ha dicho compartir las reflexiones de fondo trasladadas por el documento publicado en marzo por el Cercle de Economía, en el que entre otras cosas se pedía que el futuro modelo de financiación exigiese una mayor aportación de la Comunidad de de Madrid a la solidaridad por las ventajas que obtiene de la capitalidad. La responsable de Hacienda de la Generalitat ha descartado no obstante que Cataluña vaya a pedir tal cosa en su propuesta, ya que "estamos centrados en nuestras propias singularidades, en cómo se reconocen y en cómo se financian".
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