Una fórmula de colaboración público-privada para aterrizar la tecnología en las empresas

Un foro en el que los especialistas reflexionaron sobre la importancia de la esencial colaboración pública y privada en este ámbito. Se habló de empresas y de instituciones, en todo caso, de acuerdo a una de las definiciones del Diccionario de la Real Academia de la acepción 'empresa': «Acción o tarea que entraña dificultad y cuya ejecución requiere decisión y esfuerzo». Así sucedió a la hora de analizar aspectos como los casos de uso de la inteligencia artificial que mejoran la eficiencia y competitividad empresarial, los desafíos de adopción y estrategias de su integración, el impacto potencial de la computación cuántica en la industria, etc.

El encuentro comenzó con una entrevista del redactor de Economía de ABC José María Camarero con María del Mar Vaquero Perianez, vicepresidenta del Gobierno de Aragón, que destacó la condición de esta Comunidad como «hub tecnológico del sur de Europa, un epicentro de la transformación digital, como se demuestra con los anunciados 37.000 millones de euros en inversiones tecnológicas que, sin duda, transformarán Aragón». Un momento de cambio no sólo tecnológico, sino social «con una clara influencia en el bienestar de los ciudadanos».

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Una planificación, con el talento, las personas, como base, para un proyecto de región que debe incluir mecanismos políticos y normativos que impulsen este desarrollo (como los planes de interés general autonómico), en un marco de continua colaboración público-privada, con una unidad aceleradora de inversiones.

Un contexto, en todo caso, para buscar la mejora de eficiencia y reducir el exceso burocrático en torno a la tecnología («por ello, trabajamos en la simplificación administrativa, como parte de nuestra contribución al desarrollo social»). Todo un ecosistema en marcha en el que la vicepresidenta añadió la importancia de eventos como el congreso tecnológico The Wave, «que visibiliza la fuerza de la tecnología para la transformación social», así como el trabajo en lo que será el Distrito Aragonés de Tecnología (DAT) Alierta.

Ya en la mesa redonda, moderada por el colaborador de ABC Empresa Alberto Velázquez, compartieron reflexiones Óscar Corcho, catedrático de IA de la Universidad Politécnica de Madrid; Francisco Hortigüela, presidente de Ametic; Carlos Kuchkovsky, CEO de QCentroid y Jesús Torres, director del Grupo de Transformación Digital de CIRCE-Centro Tecnológico.

Corcho comenzó destacando la importancia de «una buena gobernanza de datos para cualquier organización para implantar la IA, más aún en una administración pública. Los funcionarios deben estar bien informados sobre lo que se puede y no se puede hacer, para un buen desarrollo de los servicios, para mejorar la eficiencia de la función pública». Entre las contribuciones de su institución en este sentido, destacan másteres como AI4Gov… formación en tiempos de disrupción sobre la que comentó cómo «adaptamos los planes de estudios a una velocidad inusual en la universidad, por cambios que nos han sorprendido hasta a nosotros»

En el caso de Ametic, que ha celebrado recientemente su evento Artificial Intelligence Summit 2025 (además de numerosas iniciativas, como el Informe 'La España Cuántica'-Informe Casos de Uso de Computación Cuántica), Hortigüela señaló cómo la asociación incumbe a los ámbitos público y privado, desde empresas a universidades, «lo que nos permite una visión completa de lo que supone y puede suponer la inteligencia artificial, sea para optimizar procesos como para optimizar la predictibilidad».

Francisco Hortigüela destacó también la relevancia para las empresas de iniciativas de ámbito europeo como la creación en Barcelona de las IA Factories («un nuevo tipo de infraestructura, diseñada por la Comisión Europea, para impulsar el correcto uso de la IA, favoreciendo su alineamiento con los valores éticos y normativos de la Unión Europea») y reivindicó la importancia del acceso de la aplicación tecnológica a las pymes («con un porcentaje que no sólo representa la mayor parte del tejido empresarial, sino que suponen un 66% del empleo»).

Kuchkovsky resaltó, por su parte, la relevancia de armonizar la convergencia de computación tradicional, IA generativa y computación cuántica: «Permitirá excepcionales avances en todo tipo de sectores, con casos como la eficiencia energética, el trabajo en proteínas para nuevos medicamentos, la innovación en catálisis para producir cemento o acero de forma más eficiente, etc.».

Un ámbito en el que el especialista subrayó la condición de España como 'nación cuántica', «por lo que es fundamental que avancemos aún más en la colaboración público-privada, desde el entorno local al nacional y europeo. En este entorno, el gobierno español lanzó en abril la primera Estrategia de Tecnologías Cuánticas de España 2025-2030, en el marco del Foro Global de Tecnología de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

El representante de QCentroid incidió también en la importancia de la eficiencia en la inversión: «En este terreno es fundamental la 'adopción audaz', y ser capaces de enfrentarnos, en tiempos de cambio, a lo que en Estados Unidos denominan la 'moving target', la 'diana en movimiento'». Un universo cuántico sobre el que estima que estamos más cerca de él «en un año que en diez».

En cuanto a Torres, aportó la experiencia de la institución en la que trabaja para afrontar desafíos basados en la experiencia de aplicación de la IA en el tejido industrial, en las necesidades de transformación en las empresas para la adopción operativa de la IA y rol de los centros tecnológicos, etc.

Destacó, en línea con sus compañeros de jornada, la importancia de «la inteligencia artificial como aporte a la predicción de la producción renovable eólica y ubicar mejores emplazamientos (como sucede en Aragón) o del estado de la red eléctrica (para detectar saturaciones y mejorar eficiencias), etc. En industria, hemos avanzado mucho en la optimización energética de procesos o la 'visión artificial', desde la misma producción a la valorización y reutilización de residuos».

Torres coincidió en destacar la relevancia de adaptarse al cambio con la rapidez que requieren estas singularidades tecnológicas como en la condición de liderazgo de España en esta 'era cuántica', «y, en todo caso, destacó la importancia de las pymes para desarrollar una capilaridad privilegiada para trasmitir tecnología».