Fin a la guerra comercial Argelia-España tras más de dos años de bloqueo

Argel, tras la decisión del Gobierno español, retiró a su embajador y en junio suspendió el Tratado de Amistad, buena vecindad y cooperación. Argel, que es el fiel defensor de la causa saharaui y soporte del Frente Polisario, congeló el comercio con España.

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Tras 882 días, el Banco de Argelia emitió una orden para poner fin al bloqueo total del comercio. En una circular enviada a las entidades bancarias del país norteafricano, fechada el 6 de noviembre, recordaba que «según la normativa vigente, los bancos intermediarios autorizados deben garantizar la regularidad de las transacciones extranjeras y operaciones comerciales». La asociación pide en el texto que se adopten todas las disposiciones necesarias para «una aplicación estricta de esta medida».

En estos más de dos años de congelación, Argel ha ido suavizando las restricciones. En enero de este año levantó parcialmente el bloqueo a las exportaciones para las transacciones comerciales de productos avícolas españoles.

La mejora de las relaciones se vio reflejada en el incremento del número de vuelos entre los dos países, autorizado por el Ministerio argelino de Transportes y sobre todo, con el nombramiento el pasado noviembre de un nuevo embajador ante España. Este veto comercial afectó directamente a las empresas españolas que quedaron excluidas de las licitaciones públicas.

Únicamente se mantuvieron las exportaciones de gas mediante el gasoducto Medgaz, de Beni-Saf a Almería. Como resultado directo de esta medida, las exportaciones españolas hacia Argelia experimentaron una disminución notable del 67% en 2023 en comparación con el año anterior.

Esta decisión del levantamiento de las restricciones a España viene precedida de una reunión de los bancos locales, convocada por la Asociación Profesional de Bancos e Instituciones Financieras (Abef), donde se tomó la misma decisión que en junio de 2022 con España, pero esta vez para Francia: no se podrán procesar operaciones de importación y exportación desde y hacia el país galo, publica 'Le Figaro'. Esto equivaldría, escribe el medio francés, a una suspensión de las relaciones comerciales entre ambos países.

Y otra vez por el mismo motivo que con España: la causa saharaui. Hace una semana, Emmanuel Macron viajó a Marruecos en una visita de Estado. En un discurso ante el Parlamento marroquí renovó el apoyó francés a la soberanía marroquí sobre el Sahara Occidental y prometió inversiones de su país en ese territorio.