Escrivá ampliará los años de subida de cotizaciones para pagar las pensiones tras el aviso de Bruselas
La Seguridad Social estudia extender los años de cobro del mecanismo de equidad intergeneracional, la cuota del 0,6% que se cargará a los trabajadores
El Gobierno descarta un recorte de las prestaciones y también elevar la tasa por encima del 0,6%, ambas opciones previstas en el nuevo mecanismo
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El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ultima cambios en el mecanismo de equidad intergeneracional (MEI) tras la advertencia de Bruselas que fue trasladada al Ejecutivo en la última vista de los 'hombres de negro' de la Comisión Europea a finales de ... septiembre. Aunque no hay nada concreto y tampoco el Gobierno ha trasladado cifras concretas a los agentes sociales, fuentes cercanas a la negociación con la patronal y los sindicatos señalan a ABC que el ministro José Luis Escrivá ya asume la necesidad de llevar a cabo estas modificaciones. Y, según aclaran, Bruselas habría pedido que estos cambios se incluyan en la segunda pata de la reforma de pensiones, que sigue sin avances en la mesa de diálogo social pero que debería de aprobarse, en principio, antes del 31 de diciembre.
Además, sobre este aspecto fuentes parlamentarias señalan a este medio que el plan del Gobierno pasa, en todo caso por «elevar los ingresos» que pueda reportar el mecanismo de equidad intergeneracional y que en ningún caso se estaría valorando modificaciones de este instrumento en materia de recorte del gasto en pensiones. Es decir, aunque no se ha concretado la fórmula, las modificaciones supondrán un aumento de recaudación de cotizaciones sociales a través del mecanismo y no recortes en las pensiones.
El mecanismo de equidad intergeneracional cabe recordar que, en la práctica, supone un nuevo impuesto sobre el empleo que se cargará en la nómina de los trabajadores, de todos con independencia del nivel salarial, y que supondrá un 0,6% del sueldo -del que el empresario se hará cargo de un 0,5% y el empleado el 0,1% restante-.
Ahora, ante la exigencia de Bruselas de que este mecanismo procure un reequilibrio de las cuentas de las Seguridad Social de forma automática, el Gobierno valora varias opciones para dar cumplimiento a las exigencias de la Comisión Europea. En este sentido, fuentes del diálogo social señalan a ABC que pese a no haber nada formulado en un documento concreto, el Gobierno trabaja sobre una idea principalmente, que sería extender el periodo de cobro de esta nueva cotización. Como ya es conocido, este recargo del 0,6% estaba estipulado en un principio para una vigencia de diez años.
Ahora, la Seguridad Social estudia extender este periodo de modo que el 'impuesto' se cobraría durante más tiempo y permitiría meter más dinero en la 'hucha' de las pensiones. Una de las opciones pasaría por extender el cobro del mecanismo de equidad intergeneracional durante veinte años más, es decir, hasta el 2050, lo que supondría de facto triplicar el potencial recaudador de esta medida.
Si en esta próxima década la Seguridad Social esperaba recaudar con el mecanismo de equidad unos 22.200 millones de euros, aproximadamente, de extenderse el periodo de cadencia de la cotización destinada directamente al pago de pensiones la recaudación podría rozar los 70.000 millones de euros.
Cabe recordar que el ministro Escrivá argumenta este periodo de cotización extra a la Seguridad Social para poder conformar un colchón de dinero que ayude a cubrir el pago de pensiones durante los picos de gasto previstos entre 2030 y 2050 por la jubilación de la generación del baby boom. Ya actualmente, las pensiones que entran en el sistema son un 20% superiores de media que las que salen.
Teniendo en cuenta este escenario y la exigencia de Bruselas, el Gobierno sería más proclive a extender el número de años en los que se cargará el mecanismo de equidad intergeneracional sobre las nóminas de los trabajadores asalariados y también autónomos. Quedando descartadas otras opciones como elevar la cuota más allá del 0,6% previsto, o incluso activar la parte del instrumento que prevé recortes de gasto en pensiones si llegado el momento del final de los años de recaudación persiste el escenario deficitario en la Seguridad Social.
Un coste «extremadamente bajo»
Sobre este aspecto, fuentes de Seguridad Social reconocen que se están intercambiando pareceres con la Bruselas sobre la línea que deberían seguir estas modificaciones. Así, en relación al mecanismo de equidad intergeneracional, Escrivá aseguró durante la rueda de presentación de los datos de afiliación de mitad de noviembre que la sobrecotización del 0,6% que arranca en 2023 es «extremadamente baja y no cambia en ningún caso la situación de costes laborales de las empresas».
Apuntaba el ministro que esta sobrecotización elevará el coste por hora trabajada que pagan las empresas por cada trabajador desde los 20,9 euros a 21 euros, mientras que la media europea está en torno a los 26 euros y otros países superan los 30 euros. «Cuando hemos visto estos elementos, hemos mirado con muchísimo cuidado que no haya efectos negativos sobre la competitividad de las empresas españolas», señaló Escrivá.
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Además, piensa Escrivá que esta sobrecotización que establece el mecanismo de equidad no restará aportaciones empresariales a los planes de pensiones de empleo. El titular de Seguridad Social cree que no será así porque los incentivos fiscales tanto para las empresas como para los empleados estarán vigentes desde el próximo 1 de enero.
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