Es la conclusión a ... la que ha llegado la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte del país, que ha publicado sus comentarios iniciales de la investigación del incidente.
Según ha expresado el informe, «parecían faltar cuatro pernos» con los que se cerraba la puerta.
Los hechos tuvieron lugar el pasado 6 de enero. El avión, un Boeing 737 MAX 9, acababa de despegar del aeropuerto de Portland, en Oregon, y se dirigía a Ontario, en California. A bordo iban 171 pasajeros y seis tripulantes.
El avión había sido entregado a finales de octubre en Alaska y certificado a principios de noviembre, según datos de la FAA.
El incidente se ha convertido en una crisis de seguridad y reputación para el fabricante de aviones estadounidense, que desacelerará la producción y correrá el riesgo de que ceda una mayor participación de mercado a su rival Airbus.
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