La economía china crece más de lo esperado antes de la guerra comercial: un 5,4% en el primer trimestre
El período, que todavía no refleja las consecuencias del conflicto con Estados Unidos, presenta datos más positivos de lo previsto gracias al fortalecimiento del consumo interno y al aprovisionamiento preventivo
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La economía de China ha crecido un 5,4% en el primer trimestre del año, según las cifras oficiales desveladas esta mañana. Un periodo en gran medida a salvo de la guerra comercial con Estados Unidos que ha disparado los aranceles mutuos ... hasta el 145% estadounidense frente al 125% chino, quebrando en la práctica un comercio bilateral valorado el año pasado en más de 650.000 millones de dólares (575.000 millones de euros).
Este crecimiento anualizado del PIB –un 1,2% en términos intertrimestrales– se coloca ligeramente por encima de las previsiones generales y en línea con el objetivo gubernamental para 2025, fijado en «alrededor del 5%» por tercer curso consecutivo en la reunión del aparato legislativo del régimen celebrada a principios de marzo. Dicho guarismo, que ya resultaba ambicioso entonces ante el declive estructural del modelo chino, lo es aún más ante la coyuntura actual.
«La economía de China recuperó algo de impulso en marzo gracias al apoyo fiscal, lo que permitió que el PIB del primer trimestre superara las expectativas. Sin embargo, esto no fue suficiente para lograr un crecimiento más acelerado durante el trimestre en su conjunto. Y con las exportaciones previsiblemente debilitándose, todo apunta a que el crecimiento se ralentizará este año», apunta Zichun Huang, economista de Capital Economics, en un informe publicado este mismo miércoles tras la divulgación de los datos.
La Asamblea Nacional Popular, de hecho, anunció entonces una subida de déficit fiscal de un punto porcentual con respecto al año anterior, hasta el 4% del PIB, que igual acaba por quedarse corta. El Gobierno considera prioritario recuperar un alicaído consumo interno para así amortiguar el brutal impacto a las exportaciones, el motor de su economía. Este mismo mes el primer ministro Li Qiang ya avanzó la puesta en práctica de más medidas de apoyo.
Algunas tímidas iniciativas, como los programas para la renovación de bienes de consumo, comienzan a dar fruto. La comercialización de electrodomésticos y muebles ha empujado las ventas al por menor, métrica representativa del consumo, a avanzar un 5,9% en marzo frente al 4% precedente.
Casi un 7% más de exportaciones
La producción industrial repuntó un 7,7% desde un 5,9%, mientras que la inversión en activos fijos se mantuvo estable en un 4,2%. Sin embargo, la crisis del sector inmobiliario –al menos un quinto del PIB– sigue lastrando el crecimiento general, con la inversión en propiedades cayendo un 9,9% en el primer trimestre. Las exportaciones, por otro lado, aumentaron un 6,9% interanual entre enero y marzo, de acuerdo a datos divulgados el miércoles, incremento atribuible al aprovisionamiento anticipado ante el inminente aumento de precios.
«El apoyo gubernamental debería seguir apuntalando la demanda doméstica durante los próximos meses. El presupuesto anunciado en marzo prevé un aumento adicional del gasto fiscal; y es probable que se produzca una nueva flexibilización monetaria en breve, posiblemente este mismo lunes», añade Huang. «Todo apunta que el crecimiento se mantendrá este año por encima del 4%, incluso pese a los elevados aranceles estadounidenses».
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