La FP Dual no encuentra pista de despegue

El presente del futuro de la FP Dual permite, en todo caso, prever incrementos y resultados, en línea con el esfuerzo de todos los implicados, como en el caso del gobierno (con la reciente Ley de Formación Profesional), las empresas y las familias, cada vez más informadas sobre las ventajas de este modelo. Una opción que debe tener como referencia el 'modelo alemán', pero con la consciencia de la menor implantación industrial en España respecto a la germánica.

El informe incluye entrevistas a representantes de 14 compañías (más de 130.000 empleos), la mayoría de ellas, multinacionales, que valoran muy positivamente la Formación Profesional Dual: con un 4,3 sobre 5 «por su excelente alineación de las competencias de los alumnos con las necesidades de las empresas, no sólo por los conocimientos, sino también por actitudes y valores. Esto facilita la decisión de contratación, reduce la curva de aprendizaje de las nuevas contrataciones y favorece tanto la inserción laboral de los jóvenes como la productividad empresarial». Una importante contribución para ajustar la definición, sobre el terreno, de las competencias profesionales para favorecer la competitividad empresarial.

Noticia Relacionada

La FP Dual abre una vía de conexión directa con la realidad de las empresas

BELÉN RODRIGO

Con esta modalidad formativa en auge, las compañías pueden ir instruyendo a los trabajadores según sus propias necesidades

Este 'wishful thinking' se enfrenta, de momento, y como señala María Luisa Blázquez, investigadora asociada de IESE y una de las autoras del informe, a la tozudez de una realidad que, al menos, ya va cambiando: «Es necesaria una mayor concienciación de todos los implicados, para una modalidad que, por ejemplo, implica recursos, con tutores y formadores y gastos en equipos (que, en el caso de empresas industriales puede llegar a requerir 12.000 euros por alumno en equipos); la reducción de la complejidad de firmar convenios en distintas comunidades autónomas con distintas regulaciones; la conexión de las necesidades de las empresas con los programas de los centros de FP, etc.».

Necesidades ante las que las grandes empresas se pueden adaptar con mayor facilidad, pero en un entorno de un país de pymes, estas ven más difícil su acceso a este modelo (de hecho, Cepyme colabora en el estudio). En este escenario, Blázquez señala la importancia de promover incentivos fiscales y de ayudar a que las grandes empresas puedan ejercer un 'efecto tractor' hacia las pymes, además de establecer «centros sectoriales de referencia, con programas y procesos que no varíen sustancialmente en cada comunidad autónoma, como vías de progreso de un modelo que precisa de una continua actualización para asentarse como una opción perfectamente competitiva frente a la universidad».

Antonio Lasaga, director de Recursos Humanos de Airbus en España y representante de enClave de Personas para el estudio, opina desde su doble condición: «Esta opción es una iniciativa estratégica para la empleabilidad de los jóvenes de nuestro país, así como para dotar a las empresas de talento especializado. Tenemos una ley que fija los pilares de trabajo y es imperativo desarrollarla a través de la colaboración entre empresas, gobiernos, instituciones educativas y estudiantes y de un entorno normativo que facilite e incentive la implementación, sobre todo en las pymes».

En el caso de Airbus, forma parte de esta conexión formación-trabajo, en un sector, el aeronáutico, altamente especializado en un periodo de continua innovación y transformación. «Necesitamos personas (comenta Lasaga) que estén a la altura del desafío que tenemos por delante. Por ello, Airbus lidera, desde 2015, una iniciativa pionera para el sector de la aeronáutica al colaborar estrechamente con el Ministerio de Educación y Formación Profesional con el objetivo de establecer programas de formación profesional que aborden las necesidades específicas de la industria».

Pedro Lozano, alumno de FP Dual del Ciclo de Grado Medio de Montaje de Estructuras e Instalación de Sistemas Aeronáuticos en la Línea del HTP del A320 de Airbus en Getafe, Madrid, resume su experiencia: «He dado el primer paso en mi carrera profesional dentro del campo de la aeronáutica, lo que me ha permitido entrar en un entorno de trabajo real y formarme en una empresa líder en el sector. A lo largo de estas prácticas aplico, en la línea de montaje, todo el conocimiento teórico aprendido en clase, especialmente en las materias de calidad y seguridad. Al mismo tiempo, estoy perfeccionando mis habilidades y técnicas sobre taladrado, remachado o montajes aeronáuticos».

Jennifer Reimundo, por su parte, es un ejemplo de que la FP Dual no se debe identificar sólo con industria, con monos de trabajo, sino también en tareas administrativas y de gestión. Repasa así su recorrido desde su puesto como asesora de clientes en Mapfre, donde ha rotado por departamentos como Comercial, Formación, Automoción y Corredores: «Comencé mis estudios porque tenía una ligera idea de las ventajas de esta modalidad, me parecía que era el modo más adecuado para incorporarme al mundo laboral, pero reconozco que inicié la experiencia con cierta incertidumbre». Dudas despejadas: «No sólo he aprendido muchísimo sobre el sector asegurador y la importancia de los seguros en el día a día, sino que, además, Mapfre me ha permitido desarrollar habilidades personales que ni tan siquiera conocía y eso ha supuesto que tenga mayor confianza en mí misma».

Otro ejemplo es el de Magdalena Vallejo, de la red Somos FP Dual (es parte de su programa de 'embajadores'), entidad colaboradora de la iniciativa Foro Alianza para la FP Dual, coorganizada por la Fundación Bertelsmann y Repsol, que acaba de celebrar en Madrid su novena edición. Vallejo, que ha cursado la FP Dual de Técnico en Procesos y Calidad en la Industria Alimentaria y que está trabajando en Nestlé, empresa que le formó, resume su experiencia: «Dejé un trabajo para volver a estudiar y reorientarme a otro sector completamente distinto y no esperaba encontrar oportunidades tan pronto. He aprendido sobre seguridad y prevención de riesgos en cada puesto, aplicación de los sistemas de calidad, organización del trabajo, etc.». «Animaría (concluye) a escoger esta opción no sólo a jóvenes, sino a cualquier persona que quiera tener una formación muy práctica, muy dirigida a las necesidades reales de las empresas, que le puede facilitar un acceso rápido al mercado laboral y, además, una muy buena experiencia personal».