Competencia estima que Renfe podrá operar el AVE a Valencia desde Atocha

De esta forma, Renfe mantendrá parte de su operativa de la línea Madrid-Valencia en Atocha. Y además tendrá que recibir una bonificación por parte de Adif por haber cambiado el resto de su operativa a Chamartín.

Porque la CNMC, aunque ha dado el visto bueno al acuerdo marco entre la operadora pública y Adif, también ha estimado que esta última deberá bonificar los servicios de todos los operadores que han sido trasladados desde Atocha a Chamartín, incluidos Ouigo e Iryo.

¿Cómo se realizarán estas bonificaciones? Según la resolución de la CNMC, se llevarán a cabo «con base en el tráfico de referencia que Adif determine de acuerdo con la situación preexistente o su previsible evolución, y se calculará en proporción a la contribución de la empresa ferroviaria a este incremento de tráfico», señala la resolución de la CNMC.

La decisión de la CNMC, como ya contó este periódico, llega desués de que la filial de bajo coste de la francesa SNCF enviara a finales del año pasado un escrito a Competencia para transmitirle su descontento con el hecho de que Renfe mantuviera cuatro trenes AVE a Valencia y Alicante (dos por destino) diarios en Atocha mientras el resto de operadores debían mudarse por completo a Chamartín.

Finalmente la CNMC ha desestimado esta petición y la operadora pública española mantendrá estas frecuencias tras su mudanza a la estación del norte de Madrid que se producirá el 23 de enero.

Pero aunque Competencia ha dado luz verde al acuerdo entre Renfe y Adif que permite al AVE a Valencia quedarse en Atocha, también entiende que podría producir una distorsión en el mercado. En concreto, la CNMC cree que existiría el riesgo de que Renfe «aprovechase los recursos adicionales generados por los servicios desde la estación de Madrid-Puerta de Atocha para fijar unos precios irreplicables por sus competidores desde la estación de Madrid-Chamartín», en el momento en que las empresas alternativas de viajeros están comenzando a operar los servicios a la zona de Levante.

En este sentido considera necesario condicionar la aprobación de la modificación del acuerdo entre Adif y Renfe «a determinadas medidas que mejoren la competitividad de los tráficos desde la estación de Madrid-Chamartín», incentivando su crecimiento a pesar del potencial impacto en de que determinados servicios se mantengan en la estación de Madrid-Puerta de Atocha.

Renfe acordó con Adif mantener parcialmente el corredor Madrid-Valencia desde Atocha a cambio de que estos viajes se efectuaran con paradas en Cuenca y Requena y con la condición de extender el número de frecuencias de trenes AVE en el trayecto Madrid-Castellón.

Lo acordaron así para aumentar los tiempos de trayecto y evitar más problemas con Competencia, que podría entender la existencia de una ventaja competitiva en favor de Renfe. En igualdad de condiciones, el viaje desde Valencia a Chamartín es alrededor de 15 minutos más largo que desde Atocha. Pero al fijar las dos paradas el tiempo de viaje sobrepasa esa diferencia.