La banca insta a los diputados a que tumben en el Congreso el impuesto al sector

«Hay que pedir a los diputados que tengan las miras largas, visión de largo plazo, no pensar en la recaudación del corto plazo sino en las capacidades de nuestra economía de apoyar a familias y empresas. Es un impuesto contra el crecimiento y el progreso social», ha dicho en el 31 Encuentro del Sector Financiero organizado por ABC y Deloitte. Un intento para convencer a los parlamentarios de que fijar este impuesto en el contexto actual no es una buena idea. Esto se produce, además, después de que algunas entidades a nivel individual hayan criticado que el sector no ha sido capaz de influir en contra de la medida como sí han hecho las energéticas.

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«El gravamen se justificó en un contexto de subidas de tipos y hoy ese contexto se ha dado la vuelta, pero han cambiado muchas más cosas. Tenemos a Trump con anuncios que tendrán impactos clarísimos, los conflictos…», ha señalado, para añadir que ahora además existen muchas necesidades de inversión en Europa.

«Nos están diciendo de mantenernos fuertes porque pueden venir curvas, un entorno complicado en el que además se nos va a pedir invertir», ha dicho, y este impuesto les impide cumplir con ello: «Este impuesto es un lastre a esa capacidad de protegernos de los problemas que puedan venir y de invertir».

Concretamente, Kindelán ha destacado que el impuesto hará que se concedan 50.000 millones de euros menos de crédito, lo que equivale «a 250.000 hipotecas menos» en España. «Muchas necesidades de financiación que desde el sector habrá que poner en la balanza», ha indicado. Esta es una de las principales advertencias que vierte el sector para tratar de convencer a los diputados de dar marcha atrás con la tramitación.

La presidenta de la patronal AEB ha denunciado también el «señalamiento» que esto supone para el sector y que tampoco han tenido ocasión de participar en el diálogo sobre el gravamen, además de señalar que genera fragmentación por su cesión a comunidades autónomas como el País Vasco.

Las palabras de Kindelán se han enmarcado en una mesa redonda junto al director general de la patronal CECA, José María Méndez, y el presidente del Instituto de Crédito Oficial (ICO), Manuel Illueca. Este último un órgano dependiente del Ministerio de Economía.

Pese a las críticas de la presidenta de la AEB, Illueca ha defendido la implantación del impuesto en este momento y ha hecho un llamamiento a ambas patronales del sector para que esto no enturbie la relación de colaboración. «Legítimas son las discrepancias pero esas discrepancias no deben empañar una colaboración excepcional entre las entidades y el ministerio, y en lo que me compete del ICO», ha explicado.

En cualquier caso, Méndez, Kindelán e Illueca han puesto en valor la enorme colaboración que han tenido en las últimas semanas a raíz del desastre de la DANA en Valencia. Todos ellos han destacado la labor que han hecho los bancos y el ICO en la tragedia, además del Consorcio de Compensación de Seguros.

«El sector bancario vuelve a contribuir a la solución a los problemas, como ya sucedió durante la pandemia de Covid-19 y el volcán de la Palma. En esta ocasión, incluso, nos hemos anticipado a las autoridades, proponiendo medidas concretas. El sector anunció su disponibilidad de otorgar moratorias antes de que estas fueran reguladas. Los técnicos de ambas asociaciones hemos trabajado en textos normativos, lo que ha permitido su aprobación con rapidez», ha dicho Méndez.