El anuncio del plan para reforzar la competitividad en la UE, pendiente de la salud de Von der Leyen

El plan prevé un cambio de la legislación que flexibilice las subvenciones públicas, teniendo en cuenta que Draghi hablaba en su informe de inversiones de hasta 800.000 millones anuales. También se prevé acelerar la creación del mercado único de capitales -ahora fragmentado por las fronteras nacionales- para favorecer la financiación privada para empresas innovadoras y en febrero se prevé también la aprobación de un plan para la simplificación administrativa.

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Ignacio Niño

El lunes está previsto que se tome la decisión de que Von der Leyen delegue o no sus funciones en la vicepresidenta ejecutiva, la española Teresa Ribera, que en ese caso presidiría la reunión del Colegio de Comisarios que habitualmente se reúne los miércoles. Una situación así, en la que el presidente de la Comisión tenga que suspender sus funciones por razones de salud, no se ha producido en los últimos años. En todo caso, el mismo lunes en la reunión previa de los jefes de gabinete de los comisarios se decidirá el orden del día de la reunión y si este incluye o no el plan económico, tal como se había previsto.

Se daba por hecho que Von der Leyen quería presentar personalmente esta Brújula de la Competitividad, que pretende ser el andamiaje de la nueva legislatura, por lo que la decisión de si se incorpora o no a su puesto dependiendo de si ha superado o no la neumonía que le afecta, tendrá distintas lecturas políticas también.

El plan pretende superar la brecha que separa a la economía europeas con las de Estados Unidos y China en materia de innovación y se basa en el diseño de un plan conjunto para avanzar en la descarbonización y dirigirla hacia la competitividad mientras por otro lado se refuerza la seguridad de abastecimiento de los materiales estratégicos para reducir la dependencia de mercados externos y que el informe de Mario Draghi hablaba de inversiones anuales a la altura de 800.000 millones anuales para llegar al 5% del PIB comunitario. El expresidente del BCE consideraba la posibilidad de una nueva emisión de deuda conjunta entre los Veintisiete para canalizar tal financiación, como ya se hizo con el plan de recuperación después de la pandemia. Sin embargo, el plan DE la Comisión confiere también un papel relevante al sector privado.