El 68% de los alquileres en España se comen más del 30% de los ingresos medios de las familias
En ciudades como Málaga y Palma menos del 10% de los anuncios de arrendamientos tienen un precio menor al del límite recomendado por el sector financiero y en Barcelona tan solo se queda por debajo del umbral el 16% de los pisos pese a tener las rentas intervenidas
El seguro de impago del alquiler del Gobierno solo protegerá al propietario cuando la renta esté referenciada al índice que limita los precios

El avance de los precios de los alquileres se come el poder adquisitivo de las familias y las deja sin capacidad de ahorro. Es un fenómeno hasta ahora más propio de grandes capitales, pero cada vez se instala más entre las medianas y pequeñas, ... que también empiezan a sufrir del problema de escasez de oferta que arrasa los mercados de municipos como Madrid, Barcelona o Málaga. Tanto es así, que el 68% de las viviendas que se alquilan en España no son accesibles para familias con ingresos medios por tener que destinar más del 30% de su capacidad económica mensual a abonar la renta, según un estudio de Idealista al que ha tenido acceso este periódico.
El 30% de los ingresos familiares es el umbral que los agentes del sector financiero recomiendan no superar para abonar el pago mensual de la vivienda, ya sea arrendamiento o hipoteca, pero la tasa de esfuerzo para los pisos que hay en el escaparate inmobiliario del alquiler exige el 36%. Teniendo en cuenta los precios medios de los arrendamientos y los ingresos medios de las familias a nivel nacional, los inquilinos deberían pagar un máximo de 764 euros mensuales, cuando el precio mediano de un piso de dos habitaciones –referencia escogida en base a los datos del INE que sitúan que los hogares españoles están compuestos por 2,4 personas de media–, se situaba al cierre de 2024 en 981 euros mensuales. Es decir, existe una brecha de 217 euros.
A nivel nacional, tan solo el 32% de los anuncios de alquiler está por debajo de lo recomendado para los hogares, lo que Idealista califica como a precio razonable, pero hay ciudades donde ese porcentaje es bastante inferior. El caso más llamativo es el de Málaga (el precio razonable en la ciudad andaluza es de 790 euros mensuales y la media allí es de 1.197) donde solo el 7% de los pisos de 2 habitaciones son económicamente aptos para una familia teniendo en cuenta sus ingresos medios, y le sigue muy de cerca Palma, donde solo el 8% de las viviendas de esas características se amolda al gasto recomendado: en la ciudad insular se piden 1.539 euros cuando el precio razonable según el portal es de 950 euros, dejando una brecha de 588 euros y una tasa de esfuerzo para cada hogar del 45% de sus retribuciones para abonar la renta.
Ambas ciudades de sol y playa se ven afectadas por los grandes flujos turísticos y el mismo efecto se puede ver en otras capitales como Valencia, donde solo el 12% de los pisos tienen precios por debajo de lo apto para los hogares, y Alicante donde el porcentaje sube ligeramente al 14%, según Idealista. Por su parte, Barcelona y Madrid, los mercados considerados como los más tensionados, tienen por igual solo un 16% de alquileres razonables. La Ciudad Condal tiene el récord nacional de tasa de esfuerzo para las familias, al representar el 49% de sus ingresos, pese a que el mercado está intervenido por los límites a los precios del alquiler. Incluso con ello, allí se llega a pagar 1.796 euros por una vivienda de dos dormitorios cuando lo ideal es que no pasara de 1.036, una diferencia de 760 euros.
El estudio de Idealista también destaca los casos de San Sebastián, donde los ingresos medios darían para alquilar el 22% de las viviendas, y Las Palmas de Gran Canaria, con el 23%. Con porcentajes por debajo del 50% están las ciudades de Santa Cruz de Tenerife (28%), Segovia (29%), Bilbao (31%), Cádiz (37%), Sevilla (37%), Salamanca (42%), Gerona (43%), Ceuta (46%), Almería y Vitoria (47% en ambos casos).
Se trata de cifras preocupantes no solo por el esfuerzo económico que tienen que realizar las familias, sino también por las dificultades que les añaden para el simple hecho de poder firmar un contrato con derecho a una casa arrendada. Como explica el portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, los propietarios tienen cada vez más perfiles para elegir y se decantan por los que les ofrecen una mayor serguridad de pago por el riesgo de morosidad o conflicto. «Esto afectó primero a los colectivos más vulnerables y siguió con aquellos que superaban el 30% de sus ingresos para pagar la renta, pero el agua ha seguido subiendo y ahora mismo familias que no superan ese umbral tienen complicado resultar elegidas ya que es muy posible que sean otros perfiles más elitistas quienes lo logren», señala el experto.
Iñareta insiste en que esto ocurre por las medidas puestas en marcha en los últimos 6 años, que están «sacando» del mercado a muchas familias «que tienen que poner su foco en infraviviendas o en piso compartidos». «Mientras las medidas que se adopten no tengan como prioridad el reequilibrio de las relaciones entre propietarios e inquilinos y se genere un entorno de seguridad jurídica será imposible que el parque disponible se acerque a las necesidades de los españoles y no se conseguirá revertir la situación de emergencia del alquiler en España», apunta.
Mayores tasas de esfuerzo
Idealista señala en su análisis que en los municipios donde se dan las diferencias entre el precio razonable y el de mercado más elevadas son precisamente las que también exigen un mayor esfuerzo a las familias que viven de alquiler. En este sentido, a las ya mencionadas Barcelona (49%) y Palma (45%), le siguen Málaga (42%), Madrid (41%), Valencia (41%), Alicante (38%), Segovia (35%), San Sebastián (34%), Las Palmas de Gran Canaria (34%), Santa Cruz de Tenerife (33%), Bilbao (32%), Gerona (31%) y Sevilla (30%).
En el lado opuesto, donde menor esfuerzo familiar se realiza es en Ciudad Real (16%), Teruel (19%), Palencia (19%), Jaén y Melilla (20% en los dos casos), que son las capitales donde precisamente hay mayor porcentaje de alquileres razonables. En este sentido, en Ciudad Real y Teruel, el 98% de los pisos de dos habitaciones serían accesibles para una familia de ingresos medios y a ambas les siguen Jaén (94%), Zamora (92%), Palencia (91%) y Melilla (91%).
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