Agricultura choca con Sánchez y Díaz y rechaza la intervención del precio de la cesta de la compra

«El Gobierno no debe, en el sector de la alimentación, fijar precios en una economía de mercado, porque el marco legal actual no lo permite. La normativa europea de competencia se aplica para todos los productos alimentarios, en todos los eslabones de la cadena de suministro, desde la producción de materias primas agrícolas hasta la venta de alimentos y bebidas a los consumidores», informan a este periódico fuentes del Ministerio de Agricultura. Choque frontal en la coalición por una medida que también rechazan las empresas de distribución y los juristas.

Relacionado con ello, lo que quiere Planas es apelar «a la responsabilidad de los operadores, para repartir los esfuerzos y márgenes de beneficio, y cumplir con lo establecido en la ley de la cadena alimentaria». Una ley con la que consideran que «se logra una mayor transparencia del mercado y mejorar el reparto de las cargas».

Si bien en privado se reproducen las críticas, en público La Moncloa cierra filas respecto a la ocurrencia de Díaz. La ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, destacó ayer en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que Pedro Sánchez está de acuerdo con esta iniciativa. «En muchas ocasiones los debates políticos no interesan a nadie, pero en este momento, cuando afectan a las cosas de comer, las familias están atentas a lo que decimos unos y otros y, en este caso, es muy importante hacer ese ejercicio de pedagogía de trasladar a la ciudadanía», explicó Rodríguez.

Mientras, Díaz insistía en la necesidad de implantar esta iniciativa. Según sus palabras, este límite sería «legal» y tomaría como referencia el tope que implantó Francia en 2011, bajo el mandato de Nicolás Sarkozy. «El presidente está volcado de lleno en atajar la inflación, el principal problema del país. Estamos estudiando medidas que son legales y han tenido buenos efectos en Francia. Sería un acuerdo», explicó Díaz.

La vicepresidenta, eso sí, no quiso aclarar si el ministro Planas conocía sus intenciones de intervenir el mercado. En declaraciones anteriores, Planas ya había cuestionado la fijación de precios en los productos. Ahora desde el ministerio confirman su rechazo total a la iniciativa.

Pero no es la única voz socialista que se levanta contra la intervención de la cesta de la compra. El portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, Patxi López, señaló ayer que la propuesta es «de dudosa legalidad», por lo que propone «actuar en otros campos». También Podemos recela de la medida y aboga más por implantar un nuevo impuesto.