Nueva Rumasa prepara la suspensión de pagos tras el plante de Oaktree
El grupo, que culpa de su situación al Banco Santander, denunciará al banco y hará una campaña contra Emilio Botín
MONCHO VELOSO
El grupo Nueva Rumasa , propiedad de la familia Ruiz-Mateos , ha anunciado que algunas de las empresas del «holding» solicitarán la entrada en consurso voluntario de acreedores —antigua suspensión de pagos—, aunque no precisó cuáles. La decisión, anunciada por José María ... Ruiz-Mateos hijo, se ha dado a conocer justo después de que el fondo estadounidense Oaktree Capital descartase invertir en el grupo.
Buena parte de las opciones de viabilidad del conglomerado Nueva Rumasa, cuyas principales empresas están en «preconcurso» de acreedores desde finales de febrero, pasaban por la decisión de este fondo de inversión, que decidió la semana pasada colaborar con el «holding». En los últimos siete días, y a través de su subsidiaria OCM Luxembourg, Oaktree ha analizado el estado financiero de todas las empresas del grupo como paso previo a una posible inversión para reflotarlo. Tras hacer esa radiografía de las empresas de los Ruiz-Mateos, el fondo ha descartado entrar en Nueva Rumasa.
Desde el «holding» insisten en que esta decisión no es fruto del estado de las cuentas con que se habría encontrado Oaktree sino más bien de un «desinterés mutuo», según han asegurado fuentes de Nueva Rumasa a ABC.
Como fuere, después de conocerse el veredicto del fondo de inversión, los Ruiz-Mateos han decidido y anunciado en rueda de prensa que varias de sus compañías se acogerán al proceso de suspensión de pagos en los próximos días. Aunque Nueva Rumasa no ha querido adelantar cuáles serán las empresas afectadas —Clesa y Dhul, las principales del grupo, están en todas las quinielas—, sí ha dejado al margen a los hoteles de la cadena Hotasa. «Van fenomenal y no tienen ningún problema de liquidez», han asegurado desde el grupo. Aquellas sociedades que no se acojan al concurso de acreedores seguirán, como ahora, en el «preconcurso».
El pasado 17 de febrero, José María Ruiz-Mateos anunció que diez empresas de Nueva Rumasa se acogían a ese procedimiento especial de la Ley Consursal, que da un plazo de hasta cuatro meses para renegociar con los acreedores la deuda acumulada. Desde esa fecha, otras compañías del grupo se han sumado al proceso y a día de hoy son 30 las que se encuentran en esa situación.
Campaña contra Emilio Botín
Además, la familia Ruiz-Mateos ha avisado de que prepara una querella contra el Banco Santander, entidad a la que culpa de su situación «extrema» al «cortar de la noche a la mañana» la financiación a las empresas del grupo. «Pensamos investigar todas y cada una de las causas que tienen abiertas, tipo Madoff o Banif», ha dicho José María Ruiz-Mateos hijo, que ha adelantado que iniciará también una campaña contra el presidente del banco, Emilio Botín.
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