Wall Street sufre la mayor caída desde los atentados del 11-S por la quiebra del banco inversor Lehman Brothers

El índice Dow Jones de Industriales, el más importante de Wall Street, ha bajado 504,48 puntos, un 4,42%, hasta 10.917,51 unidades. De nada ha servido los mensajes de calma lanzados por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el secretario del Tesoro, Henry Paulson.

Las acciones de Lehman Brothers, el cuarto banco de inversiones de Estados Unidos, han bajado un 94,25% ciento hasta los 21 centavos, tras declarase hoy en quiebra después de que este fin de semana no lograra encontrar un comprador.

El fracaso de las negociaciones para la venta de Lehman Brothers, en medio de maniobras internacionales para apuntalar el inestable sistema financiero, han arrastrado a los bancos en las bolsas europeas, culpables del desplome bursátil de este lunes negro.

Entre ellas, la española que ha visto como las malas noticias llegadas de Estados Unidos, llevaban al principal indicador del mercado español, el Ibex 35 a perder 513 puntos, el 4,5%, hasta los 10.899 enteros, registrando un nuevo mínimo anual de cierre.

Los problemas del sector financiero estadounidense también han afectado a los mercados de deuda, en el que las compras han reducido la rentabilidad del bono español diez centésimas, al 4,49%; al de materias primas -el petróleo Brent bajaba el 5%, hasta 92 dólares, y a la cotización del euro, que pasaba de 1,45 a 1,42 dólares.

Con un Ibex teñido de rojo, los mayores descensos han sido para Técnicas Reunidas (7,96%) y OHL (6,95%). De los bancos, el Santander es el que más ha caído (6,88%), seguido del BBVA (6,80%).

A la bancarrota de Lehman Brothers, que ya ha dejado de operar en España, se une la noticia de la compra del banco de inversión Marrill Lynch por parte de Bank of America, movimiento que, según los expertos, persigue contrarrestar la quiebra de Lehman. Con esta adquisición, Bank of America, el primer grupo bancario del país de las barras y estrellas, consolida su posición de gigante.

Ha habido otras noticias de peso, como el intento de diez bancos internacionales para hacer frente a la crisis de crédito mediante un programa de préstamos de 70.000 millones de dólares: cada uno de ellos aportará 7.000 millones en un fondo común al que podrán recurrir para hacer frente a sus necesidades de crédito.

Además, en la mente de los inversores está que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) decidirá mañana sobre los tipos de interés en ese país. Para el jueves presentarán sus resultados los bancos Goldman Sachs y Morgan Stanley.