El BCE toma hoy la decisión definitiva sobre el euro digital

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, dejó claro su apoyo al proyecto en febrero y la decisión del Consejo de Gobierno de esta semana debería, según todo lo que se escucha en los pasillos de Frankfurt, tomar una decisión positiva. Los bancos se han ido expresando de manera diferente en los últimos meses. Deutsche Bank advirtió en un informe de investigación sobre posibles fallas técnicas de la moneda digital y señaló que los ciudadanos obtendrán muy pocas ventajas con ella. Deutsche Kreditwirtschaft se había expresado, en términos generales, de manera bastante positiva.

El Banco de España , por su parte, ha defendido el proyecto , pero no sin advertir que tendrá implicaciones que «potencialmente pueden extenderse más allá del ámbito de la banca central y las finanzas» y afectar a la sociedad en su conjunto. Así lo explicó la semana pasada el gobernador Pablo Hernández de Cos, que dispone de un grupo de alto nivel estudiando el proyecto. «Hemos avanzado mucho, pero todavía no se ha completado el proceso de investigación y en el listado de tareas pendientes figuran, por ejemplo, una mayor concreción de las características técnicas», dijo durante la DigitalIES Summit 2021. «A esto hay que sumar –señaló también– el análisis más detallado de sus consecuencias en áreas como la estabilidad financiera, la política monetaria o la configuración y el papel de la industria financiera, que tan importantes son para la sociedad y para el banco central».

«En todo caso, será emocionante», intenta ver el vaso medio lleno Zimmermann, especialista de LBBW. Los especialistas en TI saben que no existe el software sin errores y las recientes dificultades con las aplicaciones diseñadas para la pandemia han tenido como consecuencia que el público se vuelva cauteloso. «Con la moneda digital, las dificultades técnicas podrían incluso suponer un riesgo para la reputación del BCE», reconoce. Tranquiliza a los ciudadanos al subrayar que «inicialmente, el euro digital no supondrá por ahora cambios importantes para el consumidor» , pero adelanta que «en unos pocos años, la cantidad de monedas digitales aumentará y con sus capacidades recientemente introducidas cambiarán más nuestra imagen de los medios de pago y la vida cotidiana». No le cabe duda de que las monedas digitales terminarán imponiéndose. «Bitcoin está siendo criticado ahora de la misma manera que lo fueron los primeros coches: como lentos, sucios e inmaduros. Pero la idea, como entonces, es ingeniosa y sin vuelta atrás».

El boceto del euro digital contempla que los ciudadanos deberían conseguir la nueva moneda a través de los bancos . Será dinero real emitido por el BCE como efectivo. Es probable que los bancos vendan aplicaciones y billeteras digitales, porque no se espera que los 450 millones de habitantes de la zona euro tengan una cuenta en el BCE en el futuro. Los ciudadanos podrían entonces cambiar dinero de su cuenta corriente o efectivo a través del banco por euros digitales. A diferencia del dinero bancario electrónico en cuentas corrientes, este dinero no estaría en riesgo en caso de quiebra bancaria. Pero para que no todas las personas en países como Grecia o Italia retiren su dinero de los bancos y lo cambien por euros digitales en el futuro, el BCE ha prometido un tope por billetera. Por ahora se habla de 3.000 euros, aunque LBBW considera que esta cantidad es demasiado alta.

«También se está volviendo evidente que será una variante simple», adelanta Zimmermann. «El BCE proporcionará una navaja de una sola hoja, no una navaja suiza multifuncional», trata de explicar. La velocidad de las transferencias con el euro digital será alta y el BCE debe asegurarse de que el euro digital no sea simplemente algo así como un segundo PayPal.