Teresa Ribera dirige ahora sus recortes a las renovables, que fijarán el precio de la tarifa regulada

La nueva estrategia de la ministra, que en este caso sí que ha sido explicada a las asociaciones del sector en sendas reuniones mantenidas el jueves pasado y el martes de esta semana, según ha confirmado ABC, pasa por que sean las renovables quienes determinen el precio de la tarifa regulada o pvpc, que está expuesta a los vaivenes del mercado mayorista y que hoy volverá a rozar los 200 euros el megavatio hora (MWh).

Para ello, Ribera quiere limitar el precio que reciben las renovables en el mercado mayorista a unos 60 euros el MWh, lo que se traduciría en un descenso de la tarifa regulada en un 200% (a precios actuales).

La medida podría ser llevada al Consejo de Ministros del próximo martes para su rápida entrada en vigor y se extendería a lo largo de todo 2022.

Logicamente, fijar ese tope supondrá recortar a la mitad los ingresos de las compañías de renovables , algo que no ha gustado porque se trata de una medida «improvisada y drástica», según fuentes del sector.

Las mismas fuentes han subrayado a ABC que «en el caso de que nos impusieran este tope, debería ser voluntario para las empresas» . Además, «perjudicaría a las comercializadoras del mercado libre, ya que sus clientes se pasarían a la tarifa regulada o pvpc porque sería mucho más barata».

También dudan de la legalidad de que se pueda fijar un precio máximo en el mercado mayorista liberalizado.

Cabe recordar que hace unas semanas el sector nuclear ofreció su producción eléctrica, también a 60 euros el MWh , para atender la demanda de los clientes con tarifa regulada, propuesta desechada por el ministerio dada su animadversión a todo lo nuclear.