Los sindicatos de Caixabank prometen dar guerra en los resultados y la junta

Los representantes de los trabajadores no tienen todavía definido al detalle en qué consistirán dichas movilizaciones, pero sí auguran que darán guerra al que es ya el primer banco por volumen de activos en España, con alrededor de 630.000 millones de euros. Más bien todo apunta a actos que den visibilidad a su lucha por intentar mejorar las condiciones de salida y minimizar el número de damnificados .

En línea con ese deseo de ganar espacio público, los sindicatos lanzaron ayer un SOS a las fuerzas políticas para sumarlas a su causa. «Les emplazamos a que se involucren activamente para frenar este proceso salvaje e injustificado y no permitan que les hagan cómplices del mismo», reza una carta enviada a los grupos parlamentarios presentes en el Congreso de los Diputados. Todo ello sabiendo, además, que el Estado ostenta un 16,1% del capital social en Caixabank y una silla en el consejo de administración ocupada por Teresa Santero, ex secretaria general de Industria con Zapatero .

«La avaricia de unos pocos supone el despido de 8.300 personas y el recorte de salarios para el resto», denuncian en la misiva. Y dada la participación pública en la entidad, los sindicatos consideran que el conjunto de la ciudadanía no puede ser ajena a esta situación .

Asimismo, la carta hace hincapié en que decenas de personas se ven condenadas a entrar en el ERE debido a que el nuevo presidente, José Ignacio Goirigolzarri , más que triplica su sueldo con respecto a lo que percibía dirigiendo Bankia.

Esta carta llega en un momento en el que el Gobierno ya ha tomado partido por los representantes de los trabajadores. O, al menos, eso es lo que venden los ministros del ámbito económico. Nadia Calviño (Economía), Yolanda Díaz (Trabajo) y José Luis Escrivá (Seguridad Social) lanzaron duras críticas al gremio financiero por sus ERE y, en referencia a Caixabank , aseguraron que intervendrán para intentar rebajar las pretensiones del banco. Unas palabras pronunciadas, todo sea dicho, en plena campaña electoral en Madrid .