La UE recuerda que el sistema de precio regulado era «malo y caro»

Las mismas fuentes recuerdan que «la legislación europea permite a los estados miembros aplicar salvaguardias, como intervenciones públicas en la fijación de precios para el suministro de electricidad a clientes privados vulnerables o con escasez de energía», pero al mismo tiempo rechazan la vieja fórmula de los reguladores nacionales que fijaban los precios de la energía «porque ese sistema era caro, ineficiente y estaba dominado por unas cuantas grandes empresas que controlaban el sector, lo que dificultaba la competencia para las nuevas tecnologías».

España no es ahora mismo el país con la la tarifa de la luz más cara de la UE. Este triste récord le corresponde a Alemania, aunque el mercado español está ahora en la franja de los precios más altos, por debajo de D inamarca, Bélgica e Irlanda , y justo encima de Austria e Italia . Nadie en el Ejecutivo comunitario se ha atrevido a hacer un diagnóstico concreto sobre las causas por las que en España hayan subido tanto los precios, aunque en general lo atribuyen a que ya fueron muy bajos durante los periodos de confinamiento y ahora se ha producido un aumento brusco de la demanda y una subida de los precios de las emisiones y del gas . En todo caso, la UE cree que la mejor solución para bajar los precios en este momento sería aumentar la capacidad de las interconexiones entre países, de manera que los productores de electricidad pudieran acudir a los mercados donde hay un mayor aumento de la demanda y precios más altos para contribuir a bajarlos con un aumento de la oferta.

«El mercado de la electricidad de la UE está diseñado» -afirman en la Comisión - «de manera que se inyecta primero la planta de generación de electricidad con el coste más bajo y después las demás, ordenadas por su precio, hasta que entra la última central que se necesita para satisfacer la demanda de los consumidores. Esto significa que todos los productores de electricidad, incluidas las renovables, los proveedores de almacenamiento, reciben el mismo precio por el mismo producto». Es decir, que el principal factor que opera en estos momentos sobre el precio es la alta demanda por parte de los consumidores.

En Bruselas celebran que «cada vez veamos con más frecuencia que las energías renovables están fijando el precio y reemplazando la generación de energía proveniente de combustibles fósiles durante algunos días u horas durante la jornada. Se trata de una competencia sana para crear igualdad de condiciones para las energías renovables, la respuesta a la demanda y el almacenamiento».