Las razones del conflicto en El Prat

Eulen es la sociedad concesionaria de los servicios de seguridad en los filtros de pasajeros desde junio de 2016. Los trabajadores –algunos de ellos subrogados después de que la anterior concesionaria, Prosegur, perdiera el contrato– se quejan de falta de plantilla y una merma en sus ingresos durante los últimos años. Argumentan que el número reducido de trabajadores –350– ha dado lugar a jornadas de trabajo "extenuantes" que pueden durar hasta 16 horas. Los salarios, detallan los representantes de los trabajadores, no rebasan el "mileurismo". Piden un complemento en sus emolumentos de 350 euros por paga e incorporar a cerca de un centenar de trabajadores.

La empresa dice rozar el acuerdo en varios de los puntos sobre la mesa de negociación, tanto en losaspectos sociales como en los organizativos, pero sigue rechazando de plano la propuesta de incremento salarial de los sindicatos. Según fuentes de Eulen, en la reunión que tuvo lugar ayer en el Departamento de Trabajo de la Generalitat, los representantes de la empresa ofrecieron un alza media del 7,70% en los sueldos.

AENA, titular y gestor de los aeropuertos españoles, ha acudido, tras la petición expresa de las partes, a apoyar las negociaciones. Sin embargo, su papel es de mero observador y por tanto su margen de maniobra es limitado. Es a la dirección general de relaciones laborales de la Generalitat a la que le corresponde la labor de mediación en el conflicto.

Si no hay acuerdo, el calendario de huelgas continuará, con las consiguientes aglomeraciones. Los trabajadores de Eulen han convocado paros de una hora para todos los viernes, domingos y lunes a partir de las 5.30, 10.30, 16.30 y 18.30 horas. A partir del próximo día 14, además, los trabajadores están llamados a una huelga indefinida. Aparte de los paros oficiales, el exceso de celo en los controles ha generado grandes colas durante las semanas anteriores.