Desde el pasado 1 de enero los notarios y registradores también tienen la posibilidad de prolongar su carrera profesional hasta los 72 años. Enterrada entre la montaña de disposiciones adicionales, finales y transitorias que acompañaron la ley de reforma de las pensiones ... se incluyó una modificación de la Ley sobre jubilación de Notarios, Agentes de Cambio y Bolsa y Corredores colegiados de Comercio del año 1983 en virtud de la cual se habilitó la posibilidad de que los notarios y registradores puedan solicitar su continuidad en el servicio activo hasta los 72 años, como ya se reconocía para los Fiscales y los Magistrados de la Administración de Justicia desde el año 2015.
Como ya ocurre con los funcionarios civiles que pretenden prolongar su vida laboral hasta los 70 años, no es una decisión potestativa de los notarios y registradores sino que tienen que solicitarlo expresamente a la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fé Pública del Ministerio de Justicia dos meses antes de llegar a los 70 años y será este órgano el que tenga que decidir si habilita o no esa posibilidad.
La norma especifica que la solicitud solo se podrá denegar «cuando el solicitante no cumpla el requisito de edad o cuando presentase la solicitud fuera del plazo indicado», lo que da un nivel de certidumbre elevado a los solicitantes. La polémica vino de que no se previó la situación de los profesionales que cumplieran 70 años en enero y febrero y, por tanto, no pudieron preavisar en plazo.
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