La AEB no ve necesario un fondo de ayuda para reestructurar el sector

23/04/2009 a las 04:00h.

El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), Miguel Martín, rechazó ayer la creación de un fondo especial por parte del Gobierno para ayudar a la reestructuración del sector financiero, pues considera que «es suficiente» con los tres fondos existentes de garantía de depósitos ... para cajas, bancos y cooperativas de crédito. Martín realizó estas declaraciones antes de pronunciar el discurso de clausura del XVI Encuentro del Sector Financiero, organizado por Deloitte y ABC y patrocinado por American Express y Sociedad de Tasación.

No obstante, el presidente de la AEB precisó que no tiene ningún tipo de noticias ni ha recibido ningún documento oficial para analizar el proyecto de ese fondo. Añadió que hasta ahora, los tres fondos de garantía han funcionado «muy bien» y «han resuelto todos nuestros problemas».

Aclararlo cuanto antes

De cualquier forma, discrepó con el presidente de la CECA, Juan Ramón Quintás, al descartar completamente que se vaya a producir alguna «catástrofe» en el sistema financiero español, pero sí coincidió en que es preciso realizar una reestructuración.

A su juicio, el sector es como un árbol al que «hay que podar y sanear sus raíces». Para eso dijo que es necesario prepararse y establecer los mecanismos necesarios, y «cuanto antes se aclare cómo se va a hacer esa reestructuración, mejor».

Martín, en su discurso, matizó que debe hacerse de forma que el sistema salga fortalecido, que los recursos que se utilicen se empleen para incrementar la eficiencia del conjunto del sector. También se refirió a la necesidad indicada por el G-20, de establecer claras y creíbles estrategias de salida de las medidas que por imperativos de la crisis se tengan que adoptar. Es decir, cómo los países van a deshacer las medidas de impulso fiscal, de expansión monetaria y de capitalización de las entidades de crédito. En definitiva, cómo se van a devolver las aportaciones públicas al capital y desnacionalizar aquellos bancos que se nacionalizaron por la crisis.

Martín precisó que el sistema financiero español sigue siendo sólido y, por eso, las aportaciones de capital deben hacerse para fortalecerlo en su conjunto, no para salvar entidades individuales. «Y que quede claro, que ninguna entidad debería ser liquidada, sino aprovechada para contribuir a formar otra de mayor potencia para crear riqueza y bienestar». No obstante, añadió, si se inyecta capital en una entidad debe precisarse desde el principio «que deberá devolverlo».

Descartó la vía fiscal para restablecer el fortalecimiento del sistema financiero, pues considera que esa fórmula «está prácticamente agotada y su uso sólo puede introducir mayor debilidad, desconfianza e incertidumbre».