El mercado descuenta que el Gobierno solicitará la ayuda y sube con fuerza

La Bolsa subió en el día de hoy un 6%, hasta los 6.755,70 puntos, mientras que la prima de riesgo cayó hasta los 542 puntos básicos, con el rendimiento del bono a diez años en el 6,8%.

La prima de riesgo italiana también bajó hasta los 462 puntos básicos, desde los 510 del día anterior, y la Bolsa italiana repuntó un 6,3% después de haber caído ayer un 4,66%.

Los inversores recuperaron posiciones, comprando barato en Bolsa y a intereses muy jugosos en deuda, en previsión de una posible petición de ayuda por parte del Gobierno, que es lo que provocaría la actuación del Banco Central Europeo (BCE) y del Fondo Europeo de Estabilidad Finanaciera (FEEF), y lo que el mercado lleva demandando desde hace tiempo. Los inversores descuentan que se solicitará la ayuda, los interrogantes se reducen ya al momento en que se producirá.

Todos los grandes valores del Ibex 35 subieron: Repsol, el 9,31%; BBVA, el 8,26%; Banco Santander, el 7,78%; Telefónica, el 7,18%; Iberdrola, el 5,86%, e Inditex, el 5,44%.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado hoy que decidirá si pide o no al fondo de rescate europeo que compre deuda soberana española -como le ha reclamado el BCE- una vez conozca las medidas «no convencionales» de política monetaria que ha anunciado la entidad.

«Lo que quiero es conocer cuáles son esas medidas, lo que significan, lo que pretenden y si son adecuadas, y entonces a la vista de las circunstancias tomaremos una u otra decisión», ha asegurado

Rajoy, que ha insistido en que no se decantará por ninguna opción hasta que disponga de más información. Ha recalcado que en todo caso hará «lo que convenga a los intereses generales del conjunto de los españoles», al margen de la decisión que adopte Italia, el otro país al que el presidente del BCE, Mario Draghi, ha instado a pedir ayuda al fondo de rescate si quieren que ellos compren deuda soberana en el mercado secundario.

Rajoy ha insistido en que de momento se queda con dos elementos «positivos» de la declaración de Draghi: que haya reconocido que los diferenciales de financiación entre países de la eurozona son «inaceptables», y que «por primera vez» se haya mostrado dispuesto a «intervenir» .