Maroto y Belarra se enzarzan por los precios de los viajes del Imserso

La polémica está servida y Belarra parece que no está abierta a rectificar, al menos, de cara a la próxima anualidad del programa. El Ministerio de Derechos Sociales avanzó ayer la oferta de la temporada 2022/2023 para las que se han concedido 820.000 plazas, apenas 3.000 más respecto al último año. El sector ha recibido estos números con estupor (siguen siendo más de 100.000 plazas menos respecto a 2019) igual que la confirmación de que no habrá subidas de precios paras los beneficiarios de estos viajes.

Pero el programa ya está en marcha. Esta misma semana, casi cuatro millones de viajeros mayores beneficiados comenzarán a recibir la carta informativa sobre el arranque de la nueva temporada, según ha informado el Imserso en un comunicado. Luego, a finales de junio, se espera que el Imserso publique la convocatoria en el BOE que abre el plazo de solicitud para la inscripción de nuevas personas beneficiarias o para la modificación de datos.

La siguiente etapa vendrá en septiembre, cuando a principios de ese mes se proceda a la remisión de cartas con la acreditación de todas las personas participantes. Paso previo a la apertura del proceso de comercialización que arrancará en la segunda quincena del mismo mes, y a la puesta en marcha de los viajes para mayores que ocurrirá a mediados de octubre, tras el final del verano y con el comienzo de la temporada baja.

Pero este cronograma podría volver a verse amenazado por las denuncias del sector, que ya retrasaron el año pasado el arranque de la temporada del programa de Turismo Social . Entonces, la no renovación de precios en el programa llevó a la patronal hotelera valenciana, Hosbec, (con el apoyo de la asociación hotelera española, Cehat) a impugnar los pliegos, tras denunciar que los apenas 22 euros que reciben por pernoctación, pensión completa incluida, no llegaban a cubrir tan siquiera el coste, calculado en aquel momento entre 27 y 33 euros.

Unas tarifas que si ya eran insostenibles en 2019, ahora se han convertido directamente en imposibles de explotar. La guerra de Ucrania ha disparado los costes energéticos a las empresas y el precio sin punto de retorno de la pernoctación casi se ha duplicado (hasta 40 euros). La patronal Hosbec , mandó el SOS antes de Semana Santa , pero Belarra ha vuelto a hacer oídos sordos. Lo que podría llevar a las empresas hoteleras de Benidorm , que reciben al 20% del total de viajeros mayores, a boicotear de forma masiva la próxima temporada, como así han avisado. Ahora, la pelota está en el tejado de Derechos Sociales, pero por el momento solo se abre a aumentar el número de beneficiados, «si la demanda recogida supera las 820.000 plazas que hay proyectadas».

Mientras Maroto busca intervenir de forma directa en el programa del Imserso, también comienza a proyectar en paralelo la creación de un programa de viajes para mayores a nivel europeo. Las intenciones fueron confirmadas por la propia ministra hace unos meses, que aseguró que estaban trabajando en un plan para potenciar el turismo sénior entre países de la UE «que ayude a desestacionalizar los flujos de visitantes, reforzando la industria en temporada baja así como a promover los valores europeos».