El Gobierno planta cara a los malos augurios del Fondo Monetario

En materia de déficit la institución multilateral pronosticó que este año se elevará al 7% del PIB, frente al 6,3% previsto por el Gobierno, y alcanzará el 5,7% en 2013, frente al 4,5%. Para este año la previsión del Gobierno era una contracción de un 1,7%, aunque luego la suavizó hasta el 1,5%, coincidiendo precisamente con el FMI.

Otra de las que terció en la polémica fue la ministra de Empleo, Fátima Báñez , quien aseguró que la tasa de empleo bajará en 2013 y se creará empleo a pesar de las previsiones del FMI. «Este Gobierno ha hecho un cuadro macroeconómico creíble que hace que durante el año 2013 se pueda crear empleo a final del año próximo y que baje la tasa de desempleo».

En la misma línea el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, dijo ayer que las previsiones del FMI "son más que discutibles ya que se basa en un decrecimiento de la economía mundial y, sobre todo, en la Eurozona».

La cuestión de fondo es que, al margen de declaraciones tanto del FMI como del Gobierno español, los datos son elocuentes y arrojan que el FMI es la institución que más se equivoca en materia de previsiones económicas , sólo superada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), según la diana comparada que elabora cada año la escuela de negocio ESADE.

La diana se elabora mediante el cálculo del promedio de desviaciones de los tres ultimos años entre la predicción que cada institución realiza, sobre los meses de septiembre y octubre, respecto al que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE) al finalizar el año siguiente. Las desviaciones siempre se calculan en valor absoluto, de tal modo que, por ejemplo, el FMI tuvo una desviación media en sus previsiones equivalente al 1,90% del PIB entre los años 2009 y 2011.

Cabe señalar también que, según la misma diana, el Gobierno español, entre los años 2009 y 2011 en manos de José Luis Rodríguez Zapatero, se desvió también en sus previsiones en alrededor de un 1,8% del PIB .

Además, destaca también el hecho de que la previsión del FMI, tanto para España como para el resto de países, alerta de los efectos que está teniendo sobre la contracción económica las políticas de ajuste del gasto llevadas a cabo, políticas que precisamente fueron recomendadas por esta institución, entre muchas otras, para nuestro país el pasado mes de julio.

La institución con sede en Washington, en concreto, le dijo al Gobierno español que «hay margen considerable para la asunción de medidas adicionales reduciendo más el gasto corriente, subiendo el IVA».

Sin embargo, y pese a todo, el Fondo Monetario aconsejó de nuevo ayer a los países de la eurozona, básicamente a los de la periferia, que es necesario acelerar la consolidación fiscal, la adopción de reformas estructurales y el saneamiento de la banca para evitar una recesión global, recuperar la confianza de los inversores, garantizar la estabilidad de la zona euro y, en último término, evitar la quiebra de la moneda única.

«Si no se adoptan medidas adicionales con rapidez, la confianza no será restaurada, se incrementarán los niveles de endeudamiento, habrá una mayor reducción del crédito y una fuerte contracción de la inversión, mayores niveles de desempleo y una caída más pronunciada de la producción», advierte el organismo dirigido por Christine Lagarde en su último informe sobre estabilidad financiera mundial, en el que alerta también de que en los últimos meses, y a pesar de los pasos dados por las autoridades europeas, las tensiones se han recrudecido, la confianza en el sistema financiero mundial sigue siendo «muy frágil» y la crisis de deuda soberana de la Unión Europea «sigue siendo el mayor temor» de los inversores.

«Se requiere un compromiso inquebrantable para poner en práctica las medidas ya adoptadas», explica el FMI en ese informe.

Por su parte BBVApublicó ayer sus previsiones macroeconómicas, que cifran la contracción de la economía españoal en un 1,4% del Producto Interior Bruto para este año