Freixenet se irá de Cataluña si el independentismo no vuelve a la legalidad

El presidente de Freixenet explicó que el grupo había incluido sacar la sede social del grupo de Cataluña en el orden del día de la reunión de accionistas que tenían prevista para el pasado 30 de octubre.

Pero la empresa decidió permanecer en esa comunidad autónoma porque para entonces la aplicación del artículo 155 de la Constitución había restablecido el orden constitucional en Cataluña.

No obstante, Freixenet se irá «si el 21D hubiera un resultado que creyéramos que nos podría perjudicar o fuera inconveniente», dijo desde Bruselas.

«El resultado hay que respetarlo» y «si se repite el resultado de septiembre de 2015, hay dos posibilidades: que sigan por la senda democrática y constitucional ; o que sigan por estos devaneos antidemocráticos», y en este último resultado, Bonet optaría por que Freixenet saliera de Cataluña, explicó.

Preguntado si espera que Freixenet tenga un impacto negativo en las ventas de cava en España durante las navidades vinculado al proceso independentista, Bonet dijo que espera que « no », y recordó que el ejercicio económico de la empresa no se corresponde con el año natural sino que va de mayo a abril.

«Íbamos bien y el mes de octubre ha sido malo », señaló el empresario, que subrayó que en cualquier caso el impacto no sería enorme porque el 80 % del negocio de Freixenet está fuera de España .

No obstante, auguró que algunas de las 2.773 empresas que han abandonado Cataluña desde el pasado 2 de octubre no regresarán o les costará mucho hacerlo. «Como dice el poeta (Gustavo Adolfo Bécquer), lo que vuelven son las golondrinas, no las empresas, que les cuesta mucho, sobre todo a las financieras».

El empresario explicó que «las empresas se han ido porque quieren estar en la Unión Europea » y señaló que desde los sectores económicos lo que se pide en Cataluña es «normalidad y estabilidad, nada más».

Bonet instó hoy al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont a no seguir haciendo «daño» a esa comunidad autónoma y, en referencia a él, afirmó que « lo último que tiene que hacer un político es el ridículo ».

Y se pronunció inequívocamente contra una posible salida de Cataluña de la Unión Europea, después de que Puigdemont se mostrara ayer favorable a celebrar un referéndum sobre la continuidad de esa región en la UE en declaraciones a un canal israelí de televisión.

«El presidente Tarradellas, este sí que era listo, dijo: Cataluña dentro de España y dentro de Europa », declaró Bonet, quien citó en dos ocasiones al que fuera presidente de la Generalitat de Cataluña en el exilio entre 1954 y 1977, y de forma provisional desde entonces hasta 1980, ya en democracia.

«Es un despropósito. Sólo lo podría entender si quisiera hacer daño a la gente porque salir de la Unión Europeo s ería hacer daño a la gente », insistió.

El empresario catalán agregó que «el daño, en primer término es a Cataluña, en segundo término a España y en tercero a Europa», pero precisó que « es recuperable » y dijo confiar en que se restablezca la normalidad porque «los catalanes son gente que normalmente han sido sensatos».

Sobre si aprovechando su paso por Bélgica pensaba reunirse con Puigdemont, de quien dijo se considera «amigo» aunque esté «en las antípodas de su pensamiento independentista», afirmó que no tiene intención de ver al expresidente, aunque le saludará si se lo encuentra.