El filón de Renfe en Portugal: se amplía el alquiler de trenes

Y es que el acuerdo en vigor iba a caducar el año que viene, por lo que no quedó más opción que alargar el periodo de duración de la firma, lo cual significa que los contribuyentes lusos sustentarán la nueva planificación , a razón de cinco millones anuales.

Se trata de locomotoras a gasóleo de la serie 592 , acompañadas de tres vagones cada una. Inicialmente, estaba programada la adquisición de las unidades, pero la impugnación del concurso público cambió los plazos alusivos del contrato global, que asciende a 158 millones de euros.

«Debido a los retrasos, los trenes no podrán prestar servicio hasta 2025», admite la empresa pública CP ( Comboios de Portugal , es decir, Trenes de Portugal).

El presidente de la compañía, Nuno Freitas , confirmó que los 8,3 millones gastados el año pasado con este propósito se verán reducidos a los cinco estipulados. La razón es que CP tiene previsto devolver ocho de las 24 máquinas en principio pactadas .

Pero todos los vagones no presentan el mismo coste, ya que varía en función de los kilómetros recorridos antes de pasar a manos portuguesas. Eso sí, el precio medio para los próximos meses ascenderá a 310.000 euros .

En todo caso, las condiciones finales dependerán de que se concluya la electrificación en los tramos Meleças-Caldas da Rainha y Marco de Canaveses-Régua . Mientras tanto, será necesario el material de origen español en itinerarios como Abrantes-Elvas, Casa Branca-Beja, Lagos-Tunes, Faro-Vila Real de Santo António, Régua-Pocinho y Caldas da Rainha-Louriçal .

Renfe continúa explotando así el negocio del alquiler a Portugal, un país c on déficit en este tipo de transporte y sin alta velocidad . La empresa pública española lleva casi una década siendo la tabla de salvación de su homóloga portuguesa, que de otro modo tendría más difícil cubrir las locomotoras diésel, vitales para la circulación al otro lado de la frontera. Incluso, en ocasiones, el acuerdo se ha topado con un muro: el país vecino deseaba sumar una operación mayor y la empresa española reconocía no disponer de más unidades porque todas estaban en uso.

Desde 2010, E spaña se ingresa unos siete millones de euros por el alquiler de las 20 locomotoras diésel que forman parte del convenio vigente. Solo que, en los últimos años, algunas de esas unidades han sufrido averías, razón por la cual el Gobierno luso se decidió a incrementar su petición a entre 12 y 14 locomotoras, además de ampliar el contrato hasta 2022 o 2023. Y ahora más aún.

El ministro luso de Infraestructuras, Pedro Marques , anunció hace unos meses que se reforzaría el alquiler de «material en circulación tanto diésel como eléctrico», con el objetivo de «reponer lo más rápido posible todas las condiciones de circulación en nuestras líneas regionales».

Los números que maneja CP no permiten muchas más opciones, por ejemplo la adquisición en propiedad, toda vez que el Gobierno de Antonio Costa no quiere disparar el gasto público.

El mismo protocolo firmado contempla la puerta abierta para un futuro alquiler de unidades eléctricas, así como la entrada de CP en el mercado español a partir de 2020 , cuando se liberalicen las condiciones de explotación del transporte ferroviario. No obstante, la maltrecha empresa lusa no parece estar hoy para muchos alardes.

Las nuevas composiciones deberán ser adaptadas a las claves de seguridad y señalización de Portugal, antes de ser homologadas por el Instituto de Movilidad y Transportes .

Se da la circunstancia de que el ancho de vía ibérico es común en los dos países y, en consecuencia, los portugueses únicamente pueden alquilar a España .

De manera que la colaboración con Renfe resulta fundamental para CP . Mucho más cuando el servicio se ha degradando al otro lado de la frontera.

Tanto es así que el presidente de la empresa bandera lusa, Carlos Gomes, y el ministro de Infraestructuras, Pedro Marques , comparecieron en el Parlamento para dar explicaciones, a requerimiento de los conservadores del PSD . En cuanto a la entrada en el mercado español, CP estaba interesada en conexiones focalizadas en Madrid, Barcelona, Valencia y Badajoz .