Fernández Ordóñez asegura que «el BCE no habla de un rescate» a España

Tras finalizar su discurso, Ordóñez ha asegurado a los periodistas que el BCE descarta, "en absoluto" el rescate a España, ya que "no se habla de ello" y que "lo que se ha pedido son reformas a España y Italia" sin mencionar más medidas extremas. Estas declaraciones se producen en una mañana de martes en la que la prima de riesgo de la deuda española está de nuevo alcanzando cotas alarmantes, por encima de los 410 puntos básicos, a pesar del recorte en 10.000 millones de euros en Sanidad y Educación, anunciado ayer por el Gobierno.

Durante su comparecencia, Fernández Ordóñez ha alabado tanto el retraso en la edad de jubilación que acometió el Ejecutivo de Zapatero como la reforma laboral como síntomas de progreso del España. La reforma de Rajoy, según el gobernador del Banco de España, debería acabar con una situación en la que el despido y el aumento del paro eran la única salida."La reforma laboral, seguramente, se tendría que haber hecho en 2007, cuando empezó la crisis".

Sobre la reestructuración financiera , Ordóñez ha apuntado que "aún quedan muchas cosas por hacer" y, aunque es "absolutamente necesaria", ha advertido que "no es suficiente por sí sola para que el crédito fluya".

Por otro lado, Fernández Ordóñez ha insinuado que las cajas deberían dejar de participar en negocios financieros. «Una alternativa de mayor enjundia sería la de aprobar una ley que obligase a las cajas a que, en un plazo razonable, dejasen de participar de forma significativa en entidades de crédito e invirtieran en lo que deseen -y quizá con mayor rendimiento- para seguir desarrollando su Obra Social, ha afirmado.

El crédito no mejorará mientras no aumente la demanda solvente, ha explicado, y por eso son "imprescindibles" más reformas ya que "no es probable que veamos pronto una fuerte recuperación de la economía española".

Sobre la reforma financiera de De Guindos ha subrayado qye ha dado un paso muy importante, pero que "nada en la vida es definitivo". "Si la economía empeorara, habrá que seguir aumentado y mejorando el capital ", ha sentenciado.

Asimismo, el máximo dirigente del Banco de España ha realizado peticiones a las autoridades gubernamentales tres meses antes de finalizar su mandato. Mafo ha señalado que "es trascendental seguir respetando la autonomía del Banco de España en su actuación supervisora". Por otro lado, se ha referido a la importancia de que los gobiernos no caigan "en la tentación de interferir en las decisiones de la supervisión".