De Huesca al éxito: un español en la dirección de Facebook

Oliván, un ingeniero industrial originario de Huesca, llegó a Facebook en 2007 cuando la red contaba con algo más de 30 millones de usuarios. Entonces su currículo lo hacía idóneo para trabajar en este tipo de «puntocom» . Cuando recabó en Facebook acababa de graduarse en Administración de Negocios en la Universidad de Stanford, una de las más prestigiosas de Estados Unidos y a la que la red social suele acudir para contratar jóvenes talentos.

A lo largo de su vida laboral había sido empleado de la multinacional tecnológica Siemens, de la española Fon Wireless y de NTT Data, una consultora tecnológica japonesa para la que Oliván ofreció sus conocimientos en innovación y desarrollo. Entre sus muchos talentos figura el poliglotismo, ya que Oliván además de español e inglés habla francés, alemán y japonés.

Dentro de Facebook, hoy convertida en la red social más grande del mundo con más de 900 millones de usuarios , el papel de Oliván ha ido creciendo en importancia con el tiempo. Su primera responsabilidad, muy en línea con su experiencia laboral, fue la de comandar la internacionalización de Facebook más allá de las fronteras del mundo anglosajón.

Como era de esperar, uno de los primeros mercados internacionales a los que dedicó su interés fue el español. En 2008 Facebook inauguró su versión en castellano, una vía de acceso rápido a los más de 200 millones de hispanohablantes del internet de aquel entonces. Tras un enorme éxito en este frente, Oliván adquirió nuevas responsabilidades, entre ellas la de gestionar el desarrollo y promoción de su plataforma para móviles.

Su rotundo triunfo en este cometido —488 millones de sus usuarios utilizan hoy su versión móvil— ha sido un éxito ambivalente. Por un lado, ha aumentado el tiempo que los usuarios pasan conectados y la cantidad de información y contenido que comparten en la plataforma, algo tremendamente valioso a la hora de captar el interés de posibles anunciantes.

Pero, en contraposición, como la aplicación móvil carece de publicidad, los anunciantes están perdiendo exposición . Este problema ha sido uno de los más discutidos en la cuenta atrás hacia la opción pública de venta (OPV) de Facebook, ya que la empresa carecía de un plan claro de monetización de su plataforma móvil, algo que preocupaba a sus potenciales inversores. Y tras el batacazo en Bolsa de sus acciones, parece evidente que para convencer de nuevo al capital, Facebook tendrá que solucionar este reto cuanto antes, algo para lo que la ayuda de Oliván podrá resultar esencial.

Oliván, como las demás cabezas visibles de Facebook, se prodiga poco en los medios. En España ha concedido tan pocas entrevistas que se pueden contar con los dedos de una mano.

La recencia de la OPV ha agudizado esa paradójica distancia entre Facebook y los medios de comunicación. Empresa se puso en contacto con él vía —como no podía ser de otra manera— Facebook, aunque su falta de respuesta no favoreció precisamente la misión promovida por su jefe, Mark Zuckerberg, de hacer «el mundo más abierto y conectado».