Los expertos auguran 500.000 parados más en el año 2010
El año 2010 se presenta complicado. El paro, la secuela más dolorosa de las tantas que ha traído la crisis, seguirá vigente el curso que acaba de arrancar e, incluso, lo hará con mayor intensidad de lo que lo ha hecho hasta la fecha.
Según ... las previsiones de la Comisión Europea, la tasa de desempleo llegará a afectar al 20% de la población activa española durante este año, lo que se traducirá en medio millón más de empleados despedidos. La tendencia se mantendrá, en opinión de Bruselas, una ejercicio más, hasta 2011, cuando el porcentaje de parados crecerá hasta afectar al 20,5% de la masa laboral del país.
No sólo la Comisión Europea, también la OCDE se muestra pesimista en lo que se refiere a nuestro mercado laboral. Según sus cálculos, la tasa de paro engordará este año hasta el 19,3% aunque, eso sí, en contra de la opinión de la Comisión, quien estima que la tasa de paro caerá en 2011 hasta el 19% de la población activa.
La opinión del Gobierno, mientras tanto, sigue siendo a día de hoy la más optimista del panorama internacional. El cuadro macroeconómico elaborado por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero sitúa la tasa de paro de 2010 en el 18,9%, si bien la secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, admitió ayer mismo que el desempleo registrado podría superar los cuatro millones en 2010, una cifra nunca antes recogida por las estadísticas españolas.
El caramelo envenenado
Los expertos advierten, además, de que en caso de que el desempleo de un respiro puede ser un caramelo envenenado. Según varios economistas consultados por este diario, el freno de la población activa que sufrirá España puede contener estadísticamente el repunte de la tasa de paro -pues la base sobre la que se aplicará el porcentaje será menor- pero ello supondrá un lastre adicional para la recuperación de un crecimiento vigoroso a largo plazo.
«Efecto desánimo»
De hecho, el consenso de expertos apunta a una reducción del 1% en la masa laboral española durante el ejercicio de 2010. En su opinión se deberá al denominado «efecto desánimo» que lleva a los trabajadores a retirarse del mercado laboral tras varios meses de intentos laborales fallidos.
La población extranjera está siendo la más afectada por este efecto, precisamente uno de los colectivos sobre el que se construyó la década dorada del «boom» inmobiliario español.
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