España exporta 4.346 millones: 4,6 veces más que antes de la crisis

Exportar ha sido la salida natural de las empresas tras una crisis que recortó el presupuesto del Ministerio de Defensa en un 32% en el periodo 2008-2014: de 8.494,11 millones a los 5.768 millones. En 2019 el presupuesto del Ministerio de Defensa se sitúa en 8.537 millones y la mayoría se destina al pago de las nóminas y el funcionamiento corriente de las Fuerzas Armadas.

Las ventas de armas deben recibir la autorización previa de la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa (Jimddu), que analiza las operaciones en función de los criterios del Tratado sobre el Comercio de Armas, de la posición común de la Unión Europea y de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Como mercados prioritarios de las exportaciones de defensa se encuentran cuatro países que participan en uno de los proyectos más ambiciosos de la aeronáutica militar: el avión de transporte A400M, que se ensambla para todos los países en la planta de Airbus DS en Sevilla. Las diferentes piezas del avión proceden de Francia, Alemania, Reino Unido y las propias fabricadas en España.

Los primeros cuatro países receptores de las exportaciones de defensa son Alemania (1.213 millones de euros), Reino Unido (949,9 millones), Francia (422,1 millones) y Turquía (301,5 millones). Es una muestra de la preponderancia que la aeronáutica militar tiene en el sector de la defensa en España: el 79% de las ventas españolas de material de defensa (3.434 millones). Además del A400M se encuentran otros proyectos como el avión C295, la transformación del tanquero A330 MRTT o el caza Eurofighter.

Arabia Saudí (270,2 millones de euros), Malasia (170,6 millones, también participa en el A400M) y Australia (159,3 millones) son los siguientes países en este «top ten» de países destino que completan Italia (90,3 millones), EE.UU. (80,8 millones) y Perú (78,4 millones).

Este récord podría no batirse en España a tenor de los resultados provisionales del primer semestre de 2018: el valor de las exportaciones fue de 1.705,2 millones de euros, con una disminución del 16,5% frente a lo obtenido en el primer semestre del año 2017 (2.041,6 millones de euros).

No obstante, en años venideros las exportaciones se podrían ver espoleadas por la mayor venta militar en la historia de España: las cinco corbetas que Navantia construirá para Arabia Saudí en los astilleros de San Fernando y Puerto Real (Cádiz) por un importe de 1.800 millones.

Se trata «de un contrato clave para garantizar la actividad de trabajo de Navantia, principalmente para sus astilleros de Bahía de Cádiz. El programa arrancó con la firma en julio de 2018 y el corte de chapa de la primera corbeta el 15 de enero. El quinto buque deberá entregarse en 2022», informan fuentes de Navantia. Además, Navantia será responsable del apoyo al ciclo de vida durante cinco años, desde la entrega del primer buque, con opción a otros cinco años adicionales, explican las mismas fuentes.

Durante cinco años se generarán anualmente cerca de 1.100 empleos directos, 1.800 de la industria auxiliar y 3.000 indirectos con este programa de las corbetas saudíes inspiradas en la clase Avante 2200.

Sin embargo, el asunto de las exportaciones militares a Arabia Saudí es una materia sensible, como bien comprobó la ministra de Defensa, Margarita Robles, cuyo departamento quiso vetar la exportación de 400 bombas de guiado láser. Finalmente fueron enviadas a Riad, pues este país amenazaba con paralizar la compra de las cinco corbetas de Navantia.

A rebufo de otros países de la Unión Europea, como Alemania o Holanda, que han paralizado sus exportaciones militares a Arabia Saudí por la guerra de Yemen, el sector de la defensa ve con preocupación que una medida similar pueda afectar a las exportaciones.

España tiene en la actualidad 27 licencias de exportación de armas con destino a ese país, siete de ellas de munición. Se trata de la tipología más sensible desde el punto de vista político. Fuentes del sector apuntan a una «inestabilidad e incertidumbre ante la modificacion del reglamento de exportación del Ministerio de Industria», en referencia a la paralización de algunas exportaciones con destino a Oriente Medio.

La exportación no es sólo una cuestión de grandes empresas (Airbus o Navantia). Existe un segundo nivel de compañías de defensa que también se vuelcan en las exportaciones como es el caso de la gallega Urovesa, que fabrica el vehículo Vamtac, y cuyo negocio está en un 70% en el exterior. Recientemente se hizo con un contrato de la OTAN para fabricar 139 vehículos para Portugal (60 millones de euros).

Otras empresas como Everis, Escribano Mechanical & Engineering (Omán o Perú como destinos revelados), Instalaza o el astillero vigués Rodman, con 90 patrulleros exportados en Oriente Medio, son ejemplos de espíritu emprendedor más allá de nuestras fronteras.