Las empresas europeas creen que solo una UE unida garantiza la prosperidad

«Deshacer el mercado común y las reglas de gobierno de los 28 países miembros solo servirá para reducir nuestra prosperidad. La inversión y la creación de empleo aumentan en una Europa unida» , advierte esta patronal en una carta abierta a la ciudadanía [PINCHA AQUÍ PARA LEER LA CARTA COMPLETA] . «Y, aunque siempre respetaremos la decisión soberana del pueblo británico, entendemos que una Europa sin Reino Unido sería más débil, como también lo sería Gran Bretaña fuera de Europa», añade la asociación, en la que están representadas multinacionales como Siemens, Arcelor Mittal, Deutsche Telekom, Volvo, Nestlé, L’Oréal y las españolas Iberdrola, Inditex y Telefónica.

Estas compañías creen que ante un hipotético abandono del Reino Unido otros Estados miembro podrían iniciar el mismo movimiento, lo que supondría el desmoronamiento del proceso de construcción de la UE. Cabe recordar en este sentido el avance de partidos políticos de corte ultranacionalista, antieuropeo y populista en países como Austria, Hungría, Francia, Holanda, Dinamarca y Finlandia a raíz de la crisis del euro, el terrorismo, la inmigración y ahora el Brexit. «A medida que ha ido creciendo el debate en torno a estos temas se ha puesto en duda el valor de la UE», lamenta la ERT.

Las empresas firmantes de la misiva asocian ese auge del populismo y el proteccionismo nacionalistas a las frustraciones de parte de la población europea, pero alertan de que sus soluciones pueden ser dañinas . Así, instan a las instituciones europeas a mostrarse más cercanas a los ciudadanos y a los socios a demostrar que son capaces de adoptar soluciones comunes.

«Nuestro continente se ha beneficiado enormemente de la UE que, desde su creación, ha sido motor de transformaciones positivas , tanto en las esferas económica y social como en asuntos de seguridad, y en términos de calidad de vida. Durante los últimos 60 años, empresas y familias han florecido y prosperado gracias, principalmente, a unos lazos más estrechos entre las personas e instituciones en toda Europa», explica la Mesa, que da una serie de datos para sustentar esa tesis.

El principal es que la UE es un potencial socio comercial para el resto de países al ser un mercado formado por 500 millones de consumidores con una renta per capita de 25.000 euros , la más alta del mundo, y tiene un PIB de 14 billones de euros, el triple que en 1992.

Europa, defiende la patronal, mueve el 16% del comercio mundial y cuenta con numerosos acuerdos globales; es líder en inversión recibida; las regiones más pobres han mejorada sus perspectivas económicas gracias a los fondos regionales; dispone de sectores bien liberalizados, una competencia justa, un regulación armonizada y elevados estándares de seguridad laboral, alimentaria y de producción.

«No cabe duda de que la UE necesita reformas, pues aún no ha terminado la tarea de abordar sus desafíos actuales . De vital importancia es la necesidad de estrechar la cooperación transfronteriza en seguridad antiterrorista así como afrontar las causas y consecuencias de la crisis de los refugiados», señalan los grupos industriales.

Además, la Mesa recuerda la necesidad de seguir avanzando en la construcción europea constituyendo un mercado energético integrado y eficiente; desarrollando un sistema educativo coordinado con el mercado laboral, y crear unos mercados de capitales y laboral europeos útiles para las pymes y un mercado único digital. «Todo ello dará a las empresas europeas, tanto grandes como pequeñas, una mayor competitividad para avanzar en la creación de empleo y el fortalecimiento del crecimiento económico», dice la carta, firmada por el presidente de la ERT, Benoit Potier, presidente y consejero delegado de Air Liquide, y el resto de empresarios de la Mesa.

«Como líderes de algunas de las mayores empresas europeas invitamos a todos a renovar la confianza en la UE como primer paso para resolver los desafíos comunes. Solo desde planteamientos conjuntos para solucionar problemas comunes conseguiremos introducir los cambios necesarios para mejorar las condiciones de vida y trabajo de los habitantes europeos y en particular de los jóvenes y las generaciones futuras», remata la carta, en la que los empresarios advierten que de ningún país miembro puede afrontar por sí solo los desafíos a los que se enfrenta en Viejo Continente. «Nunca ha habido razones más que fuertes que ahora», dice la misiva, «para que Europa trabaje y permanezca unida» .