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Bruselas alerta de que el cambio en el impuesto de las hipotecas reducirá y encarecerá el crédito

La Comisión Europea lanza un serio aviso a la Sareb por registrar una «liquidación de activos es más lenta de lo previsto» y «continuar registrando pérdidas»

El informe destaca el «robusto crecimiento» de España, aunque señala la mala evolución de las exportaciones EFE

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El cambio en el impuesto de las hipotecas que traslada su pago al banco tendrá el efecto contrario al esperado por el Gobierno: contraerá el crédito y lo encarecerá. Así lo ha expresado la Comisión Europea en su último informe de evaluación de la situación económica y financiera de España, el décimo después de que nuestro país saliera del programa de ayuda financiera en enero de 2014 . El documento resume las conclusiones del equipo enviado por la Comisión y del que también forma parte personal del Banco Central Europeo (BCE), que visitó nuestro país los días 4 y 5 de octubre, en los días previos a que Tribunal Supremo estallara la polémica y fallara a favor de que fuera el banco y no el cliente quien abonara el impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD).

«Después de algunas semanas de incertidumbre, el Tribunal confirmó que los clientes seguirían teniendo que pagar el impuesto de AJD de la hipoteca, lo que confirma una práctica de 20 años. Esta decisión final dejó en claro que los bancos no tendrían que asumir posibles pagos retroactivos de dichos impuesto, lo que habría tenido un efecto significativo en los balances de los bancos. El gobierno reaccionó de inmediato ante esta decisión y modificó la ley. Ahora, para las nuevas hipotecas serán los bancos los que tendrán que pagar este impuesto . Esta nueva carga en el sector bancario podría tener efectos sobre la nueva concesión de crédito y sobre las tasas u otros costes que deberán pagar los clientes», advierte la Comisión.

Además, la Comisión lanza un serio aviso a la Sareb pues registra una «liquidación de activos, tanto préstamos como inmuebles, más lenta de lo previsto y la compañía continúa registrando pérdidas». Además, «la compañía sigue inclumpliendo sus objetivos del plan de negocios». Según explica Bruselas, «los márgenes de la compañía, en particular sobre los préstamos, disminuyeron ligeramente en comparación con 2017, debido a la baja calidad de los activos puestos a la venta y al aumento de la competencia».

Una de las razones a las que apuntan los expertos de la Comisión como causa del incumplimiento presupuestario de la Sareb, es la desigual recuperación del mercado inmobiliario español. «Los activos inmobiliarios a menudo se concentran en áreas con una recuperación de precios más lenta de lo esperado. Además, algunos procedimientos legales y administrativos para convertir los préstamos en activos adjudicados se han retrasado, lo que podría impedir su liquidación más rápidamente. Los ingresos totales de Sareb en el primer semestre de 2018 ascendieron a casi 1,6 mil millones de euros mientras que en el conjunto de 2017 alcanzaron los 3,8 mil millones de euros», destaca el informe. No obstante, el documento también destaca el cambio de estrategia puesto en marcha por los directivos de la compañía. «Con vistas al vencimiento de los contratos con los "servicers", Sareb planea introducir una nueva estrategia de gestión de activos», asevera.

Por otra parte, Bruselas considera que los planes de resolución de los bancos que necesitaron recibir ayuda comunitaria «están bien encaminados», no obstante, no descarta que algunas pequeñas entidades pudieran «enfrentarse a algunos desafíos» en caso de que se eleve el colchón de capital anticrisis exigido hasta el momento.

Y es que los desafíos para el sector financiero no son menores, especialmente por las dificultades de hacer negocio que actualmente afrontan las entidades. «Aunque la rentabilidad general en el sector bancario está mejorando, los bancos siguen bajo presión debido a los bajos tipos de interés . El prolongado periodo de tipos bajos ha terminado afectando los márgenes de interés y para compensar este efecto algunas entidades podrían sentirse inclinados a asumir mayores riesgos a la hora de conceder nuevos préstamos. En este contexto, las entidades de crédito y los supervisores deben garantizar unos e stándares de crédito suficientemente conservadores» , alerta Bruselas. Además, no hay que olvidar que los costes de los litigios después de algunas sentencias judiciales «podrían ejercer una mayor presión a la baja sobre la rentabilidad».

En el plano macroeconómico, Bruselas ha destacado el «robusto crecimiento» del país, aunque señala la mala evolución de las exportaciones, que cayeron más de lo previsto y tuvieron una contribución negativa al crecimiento. Y alerta de los riesgos para el crecimiento, tanto a nivel nacional como internacional, así como de decisiones políticas como el aumento del salario mínimo. En concreto, la Comisión advierte de «un crecimiento global y de la UE inferior al esperado , proteccionismo y tensiones comerciales, precios del petróleo y tipos de cambio del euro más altos de lo previsto, incertidumbre política interna y externa, política monetaria e incertidumbre con respecto al impacto de ciertas medidas como el aumento propuesto en el salario mínimo».

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