El Banco de España alerta del frenazo en la inversión empresarial y anticipa la recaída del comercio exterior

Recientemente la institución publicó sus proyecciones para el país. Para los últimos tres meses del año espera una contracción de hasta el 3% intertrimestral en el escenario severo, del 0,8% en el central (el más probable) y un alza del 0,6% en el suave . Tres escenarios en función de la evolución de la pandemia y la aplicación de la vacuna. En su informe de hoy, el supervisor ha recordado de nuevo dichas cifras y ha lanzado varias alertas.

«La inversión empresarial habría retrocedido en los últimos meses del año, afectada por la elevada incertidumbre», señala el documento. El Banco de España explica, así, que «la materialización de numerosas decisiones de inversión podría estar viéndose aplazada debido a la elevada incertidumbre respecto a las ventas futuras, a la significativa disminución del grado de utilización de la capacidad instalada y al descenso de los recursos disponibles para llevar a cabo estos gastos». Sobre el drama de la inversión han venido advirtiendo las diferentes patronales en los últimos meses; ahora el tejido productivo no está en ello, sino en sobrevivir .

Tal es así que, como informó ABC, los avales del ICO para inversión que puso en marcha el Gobierno han resultado no tener efecto. No tienen demanda y están aparcados, al tiempo que el Ministerio de Economía está valorando ya fórmulas para reorientar esas garantías públicas (40.000 millones) que se han demostrado un fracaso en estos momentos.

Pero las advertencias del Banco de España van más allá de este asunto. En su informe, asimismo, pone el foco sobre «una nueva recaída de los intercambios comerciales con el exterior en el tramo final del año» . Lo cierto es que el sector exterior se ha visto muy resentido por la pandemia y, como publicó este periódico, encaraba en los últimos tiempos de nuevo a la baja. La institución señala que «la información más reciente disponible apuntaría a que la aportación de las exportaciones netas al avance del producto habría retornado al terreno negativo en el cuarto trimestre, con un debilitamiento más acusado de las exportaciones —lastradas, en especial, por la caída del turismo no residente— que de las importaciones». Cabe recordar que el sector exterior supuso en 2019 algo menos de un 35% del PIB, lo que da buena cuenta de su importancia para España.

Este escenario más adverso en el cuarto trimestre a causa de las restricciones también podría llegar a tener efecto negativo sobre los más vulnerables de la economía. «Una mayor persistencia de la actual crisis podría provocar un empeoramiento de la situación financiera de aquellos agentes que se hallan en una situación de mayor vulnerabilidad patrimonial , ampliando así los efectos económicos adversos de la pandemia». Y en relación a ello, el Banco de España recuerda una circunstancia que reseñó hace dos semanas en un artículo analítico: «Distintos ejercicios de microsimulación desarrollados por el Banco de España evidencian que la crisis sanitaria causará en 2020 un incremento significativo en el porcentaje de empresas que soportan una presión financiera elevada —entendida como la insuficiencia de los resultados generados para cubrir los intereses de la deuda—, hasta situarse en torno al 40%, así como un deterioro, aunque más moderado, de la solvencia del sector corporativo».

Más allá de ello, la institución ha vuelto a rebatir los cálculos del Gobierno sobre el impacto económico de su plan de recuperación con la llegada de los fondos europeos. Ya avisó de los riesgos de ejecución de todo el dinero comunitario en sus recientes proyecciones y ahora ha hecho hincapié de nuevo: «La incertidumbre acerca de la materialización concreta del uso de los recursos del NGEU sigue siendo elevada». Y tacha de «alta» la incertidumbre sobre su impacto.

Así las cosas, en sus proyecciones ya avisaba de que su contribución al PIB en 2021 apenas sería de 1,3 puntos porcentuales, frente a los 2,6 que prevé el Ejecutivo. Incluso, el Banco de España calculaba que el efecto en el trienio 2021-2023 sería de 1,7 puntos, lo que está por debajo, de hecho, de lo que estima el Gobierno solo para un ejercicio.