La banca pone condiciones para inyectar 50 millones a Isolux

Según ha podido saber ABC, este pago, que iba a ser efectuado entre ayer y anteayer por el G-3 (el grupo de bancos acreedores a los que más debe: Santander, Caixabank y Bankia) ha condicionado poner dicha cantidad a que el G-5 (estas tres entidades, más Banco Sabadell y Banco Popular, los siguientes en la lista) asuma una operación de avales sindicados por importe total de 45 millones de euros.

Pero no hay acuerdo aún. Estos 50 millones de euros son un anticipo de la reestructuración global de la deuda de la firma de construcción e ingeniería donde se pondrán 200 millones euros entre todas las entidades del que sería el G-11 (el G-5 más Société Générale, Unicaja, ICO, Liberbank, Natixis y Bankinter).

Y es que con el objetivo de evitar que Isolux cayera en preconcurso de acreedores, la banca acreedora abrió conversaciones con la compañía a principios de esta semana para reestructurar una deuda que en total supera los 4.600 millones , al sumar también los impagos a proveedores.

Precisamente, ante la falta de liquidez inmediata, los proveedores mantienen su intención de resolver las diferencias con Isolux en la Corte Española de Arbitraje. De hecho, desde el pasado mes de septiembre, la Plataforma de Afectados por Isolux -que representa ya a un centenar de empresas que reclama pagos a la compañía que «aún» preside Luis Delso- ha conseguido algunas resoluciones de los primeros arbitrajes que se plantearon a finales del año pasado en los que se ha llegado a aceptar el pago diferido.

Isolux vive «in extremis» desde que entrara en números rojos en 2014. Por esta razón no pudo realizar sus planes de salir a Bolsa a principios del año pasado. Su salto al parqué era la principal opción que barajaba entonces para captar unos 600 millones de euros, pero tras pasar de un beneficio de 6,64 millones en 2013 a unas pérdidas de 38,5 millones en 2014, decidió cancelar sus planes.

Ahora, la única opción para evitar entrar en concurso de acreedores y lograr ser viable en el futuro solo será posible con la firma de un proceso de reestructuración de la deuda y con un plan de desinversiones que ya ha comenzado, además del cambio en la cúpula directiva, adelantada por ABC : cambio de presidente y cambio de director general.