El auge del teletrabajo dispara el apetito inmobiliario por la España vaciada

Los cambios de hábitos de compra de viviendas generados por la pandemia y el teletrabajo, que parece haber llegado para quedarse, presentan una oportunidad única para las regiones que sufren despoblación . «La España vaciada tiene una oportunidad para recoger este efecto y aumentar sus poblaciones. Poblaciones con menos de 10.000 habitantes están teniendo una demanda que puede llegar a consolidarse con el trabajo a distancia», explica Emiliano Bermúdez, subdirector general de Donpiso. Pero para que esto ocurra, las administraciones locales deberán ser capaces de hacer frente a nuevos retos como infraestructuras de comunicaciones o acceso a sanidad, a educación y supermercados en estos pueblos de la España olvidada. Algunos expertos incluso han llegado a mencionar incentivos fiscales para promover la repoblación .

La pandemia apenas logró menoscabar la oferta inmobiliaria de las autonomías que más sufren de despoblación como son Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha, Extremadura y Galicia. Así, en su conjunto las comunidades más afectadas por este fenómeno en su conjunto apenas tuvieron una disminución de la oferta de un 1,15% desde marzo, mientras que algunas regiones como Castilla y León y La Rioja , vieron incluso un crecimiento de la misma (3,8% y 1,51%, respectivamente).

Al inicio de la pandemia la oferta inmobiliaria de estas autonomías era de 99.627 viviendas, mientras que para noviembre era de 98.485 residencias, un millar menos. Con respecto al incremento de la oferta en las dos regiones, José María Basañez, presidente de TecniTasa, explica que La Rioja es una comunidad con muchos pueblos cerca de la capital y que « ahora es que hay apetito, como consecuencia de la subida de demanda ha subido la oferta ».

La pequeña fluctuación de la oferta en estas comunidades, muy distinta a los cambios de tendencias mucho más violentos de las grandes ciudades, se explica en que «la estabilidad de estas regiones durante la crisis va más vinculada a los índices de natalidad y de defunciones, así como a la productividad de su tejido empresarial, especializado en los sectores primario y secundario, que a aspectos macroeconómicos o fluctuaciones del turismo», apunta Ferran Font, director de estudios de pisos.com.

El valor refugio de una vivienda asequible, por ahora, está en los pueblos. «El precio de venta por m2 en estos pueblos está por debajo de 500euros el m2. Una vivienda de 100m2 cuesta entre 40.000 y 50.000 euros», explica Bermúdez. Estos son precios que se ubican muy por debajo de la media de las comunidades que, de por si, ya están clasificadas como las más baratas.

En Castilla-La Mancha, que lidera la lista de precios más baratos del territorio nacional, la media del precio de venta de viviendas es de 897 €/m2, en Extremadura de 1.018 €/m2, en Castilla y León de 1.233 €/m2, en Aragón de 1.278 €/m2, en Galicia 1.372 €/m2, en La Rioja 1.454 €/m2 y en Asturias de 1.479 €/m2, según pisos.com.

«La única duda es la de si este cambio será coyuntural o estructural . De poder hacer frente a este cambio sustancial en las comunicaciones de estos pueblos, habrá un efecto en el mercado inmobiliario español. Seguramente tendremos crecimientos de precios», subraya el subdirector general de Donpiso.