El 84% de los clientes está dispuesto a cambiar de compañía para ahorrar en el móvil

Solo la franja de consumidores de entre 40 y 50 años encuestados manifiesta de forma mayoritaria que prefiere seguir con su compañía aunque ello implique pagar más. La calidad (volumen de datos ofrecidos, televisión de pago, servicios de «streaming») es el segundo factor que los clientes más valoran, en concreto el 44% aunque por debajo del 59% que lo hacían un año antes.

Todo esto es coherente con la guerra de precios librada en la última década por los operadores de telefonía tras la irrupción de las compañías de bajo coste y que disparó la portabilidad de clientes de unas marcas a otras, facilitada además por un cambio en la regulación. Es más, la popularidad de la marca, según el citado estudio, es el elemento que menos se tiene en cuenta. Eso sí, la tendencia es a agrupar los servicios: el 63% de los encuestados declara tener un paquete con varios servicios —móvil, internet, fibra y televisión— agrupados en una sola factura . Y esto son cada vez más caros .

El número de usuarios únicos de telefonía móvil a nivel mundial a final de 2017 se situó en 5.000 millones, según recuerta el informe de Comparaiso. Esto supone que el 66% de los habitantes tienen un terminal. Además, el número de contratos o tarjetas SIM, 7.800 millones, superó por primera vez al número de ciudadanos. La telefonía móvil no solo ha ido sustituyendo a la fija —el 62% de los encuestados ya no consideran útil tener teléfono fijo en casa—, sino que además ha habido un cambio en los hábitos de uso: 9 de cada 10 consumidores admiten que Whatsapp es la principal razón de uso del móvil y solo uno de cada diez opta por las llamadas.