España cerró su inspección a Banco Madrid justo antes del aviso de EE.UU.

Según han explicado a Efe fuentes del proceso, España tenía puesto el foco en Banco Madrid desde hacía tiempo porque su único accionista tenía la sede en Andorra y, además, la entidad se dedicaba al negocio de la banca privada, considerado de alto riesgo por la normativa internacional de prevención de blanqueo de capitales. Además, el Sepblac ya conocía que Banco Madrid estaba implicado en una operación policial contra el crimen organizado ruso y tenía constancia de su presunta participación en el flujo de efectivo objeto de una investigación penal. Los focos apuntaban.

La entidad, que solicitó el lunes pasado el concurso de acreedores, está pendiente de que el fondo de rescate, el FROB, dependiente de Economía, decida si la rescata o procede a su liquidación, para lo que dispone de un plazo de catorce días. Todo indica que tendrá lugar la liquidación de la entidad, que será liderada por el juez de lo mercantil. Este proceso, según ha declarado el ministro de Economía Luis de Guindos, no afectara al sistema financiero.

Además, todavía está pendiente la situación de los fondos de inversión y de las sicavs gestionadas por Banco Madrid, cuyos reembolsos fueron suspendidos el lunes por la CNMV. Son unos 21 de los 72 fondos que administraba la gestora de Banco Madrid, que afectan a unos 14.000 partícipes por un importe de algo más de 900 millones de euros. Desde ahora, el supervisor puede traspasar con cuidado los activos de estos fondos a una tercera entidad que se habilite para ello, un nuevo depositario, pero también podría separarlos de forma temporal, antes de venderlos.

Un apartado especial lo componen los fondos de entidades como Liberbank o BMN, que gestionaba Banco Madrid y que, de momento, se encuentran suspendidos. Liberbank intentará previsiblemente recuperar el control de los fondos, quizás con la creación de una nueva gestora, lo que podría durar semanas. BMN es partidaria de traspasar la gestora a otra entidad.

Según datos de la consultora de instituciones de inversión colectiva Morningstar, la gestora de Banco Madrid sufrió fuertes reembolsos antes de que la CNMV decidiera suspender esta operativa. En concreto, unos 76,32 millones en apenas tres días entre fondos de inversión y sicavs, en paralelo a la fuga de depósitos.