muere emilio botín
¿Qué hay detrás del Pantone 032C, el rojo corporativo de Banco Santander?
Hoy en día la marca de la entidad está entre las cinco más valoradas a nivel mundial pero no fue siempre de ese color
Esta semana el mundo ha dicho adiós a uno de los banqueros españoles más influyentes a nivel mundial. Con la muerte de Emilio Botín , presidente de Banco Santander, el pasado miércoles, se ha rememorado el legado de una familia y de una entidad que ... supo crear un hueco para España entre los «grandes» de la banca. El «banquero que vestía de rojo», como muchos le recuerdan , llevaba los colores del Santander con orgullo. Tanto que en 2012, en un encuentro en Brasil con Don Juan Carlos, Botín recibió al monarca vestido con unas bermudas y un polo rojo corporativo.
El rojo Santander es una de las características más reconocidas de todas las que componen la marca. Una identidad que ha sido valorada como la cuarta más importante entre los bancos a nivel global. Además del color y de, por supuesto, el nombre, la esencia corporativa está compuesta por un «símbolo» -una «S» que se convierte en llama- y una tipografía especial. Para el banco, la llama evoca «la luz, el liderazgo, el calor y a la vez es símbolo de pensamiento, de chispa, de idea». En cuanto al tipo de letra, la palabra «Santander» está escrita en Berling, específicamente diseñada para la empresa y que representa «el compromiso».
Eso sí, cuando el Banco de Santander nació en Cantabria en 1857 la imagen de la entidad se representaba con una tipografía clásica de la época. En 1949, pasó a identificarse con un anagrama del nombre y en 1972 la denominación del Santander aparece en mayúsculas, de color verde y con el símbolo compuesto por las letras «B» y «S» enmarcadas en un cuadrado. En 1986 aparece por fin la «llama» olímpica, presente aún en 2014. Eso sí, de color verde.
No fue hasta 1989 cuando la entidad adoptó el color rojo como parte de su seña de identidad. Y no cualquier «rojo». El «Pantone 032C» es el tono exacto que usa Banco Santander, una seña visual que, para la compañía, evoca energía, valentía y dinamismo. Es ese mismo año cuando juntan la llama adoptada en 1986 y el rojo del 1989 para crear la marca Santander más similar a la que conocemos hoy.
En 2004, bajo el liderazgo de Emilio Botín , el consejo de administración del banco pone en marcha un plan de «convergencia de marca única» con el objetivo de unificar sus distintas marcas existentes bajo el paraguas de una sola marca: Santander. Pero es finalmente con la estrategia de 2007-2010 cuando la marca se catapulta a las listas de marcas mejor valoradas. Un hito conseguido gracias a los patrocinios de deportes como la Fórmula 1 o y el fútbol, dos de las grandes pasiones de Botín.
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