Enagás y Gas Natural, las más afectadas por el ajuste de 238 millones del sistema

Para ello, elimina todas las actualizaciones automáticas de precios existentes en el esquema retributivo. Es decir, se suprime la indexación para evitar que suban los costes y su nueva retribución estará ligada en gran parte a la demanda, según el real decreto-ley de medidas urgentes en el ámbito de los sectores energéticos aprobado por el Consejo de Ministros.

El secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, ha explicado que el nuevo modelo supondrá un ajuste de 238 millones al total de las actividades reguladas del sector (unos 3.350 millones este año) repartidas de la siguiente forma: 110 millones de euros en distribución, 97 millones en transporte, 23 millones en las plantas de regasificación y 8 millones en almacenamientos subterráneos. Estos recortes afectarán principalmente a Gas Natural Fenosa (tiene una cuota del 70% en distribución) y a Enagás, el gestor técnico del sistema, que posee una posición mayoritaria tanto en transporte como en las regasificadoras y en los almacenamientos subterráneos.

El déficit actual del sistema gasista se reconoce como deuda y lo financiarán las propias compañías del sector durante 15 años. El nuevo modelo estima un déficit máximo anual de unos 300 millones de euros. Si se supera esa cifra (el 10% de los ingresos del sector), se incrementarán los peajes de forma automática.

El real decreto-ley contempla también la liberalización del precio de las bombonas de butano «ligeras» de 12,5 kilos de peso. Es decir, las de Cepsa, cuya tara (peso en vacío) no alcanza los 9 kilos y que también se puede adquirir en estaciones de servicio. La tradicional bombona «pesada» de Repsol seguirá manteniendo un precio máximo, que actualmente es de 17,50 euros, y la obligación de reparto a domicilio.