Iberdrola obtuvo el 62% de su beneficio de 953 millones de euros fuera de España

Iberdrola ha obtenido un beneficio neto de 952,6 millones de euros (+8,4%) durante el primer trimestre del año, mientras que el beneficio neto recurrente –sin extraordinarios- ha alcanzado los 848 millones (-4,6%). El beneficio bruto de explotación (Ebitda) se ha situado en 2.126,5 millones (-0,3%) durante el periodo, en línea con el primer trimestre del ejercicio anterior.

El grupo obtuvo el 62% del beneficio neto recurrente fuera de España (+22,3% respecto al mismo periodo de 2013), mientras que nuestro país, que ahora representa el 38% del total, redujo su aportación el 25,2%, según han explicado esta mañana los directivos de la compañía a los analistas e inversores.

Los resultados del trimestre se han visto afectados por el impacto negativo de las medidas regulatorias aplicadas en España desde julio de 2013, que asciende a 260 millones de euros en margen bruto. Para 2014, Iberdrola estima que el efecto de estas medidas alcance los 380 millones euros.

El crecimiento del beneficio neto del grupo que preside Ignacio Galán durante los tres primeros meses del año se debe a la aportación de los negocios internacionales e incluye resultados extraordinarios obtenidos por Iberdrola gracias a la venta de parte de su participación en la portuguesa EDP y a la desinversión de activos en Brasil.

La partida de tributos se ha incrementado un 9,9% durante el primer trimestre del año hasta alcanzar los 444,6 millones de euros. De esta cantidad, un 64% (286 millones) corresponde a España, donde los tributos crecen un 21% con respecto al mismo periodo del ejercicio anterior.

En cuanto a las energías renovables, los mayores factores de carga y la positiva aportación de Reino Unido, Estados Unidos y Latinoamérica no han logrado compensar el impacto de las medidas regulatorias de España y los menores precios registrados en el negocio de renovables, cuyo Ebitda alcanza en el primer trimestre los 371,4 millones (-27,1%).

Por países, España registra un descenso en el Ebitda del área renovable del 63%, mientras que el beneficio neto cae un 91% como consecuencia del impacto negativo de las nuevas medidas regulatorias y fiscales y a pesar de las extraordinarias condiciones de viento registradas en el trimestre, que han llevado a la eólica a registrar una producción récord en el periodo.